¿CÓMO SANAR EL ABUSO SEXUAL INFANTIL NO ELABORADO? PARTE 1
Este es tal vez uno de los temas más desgarradores que pueden existir en nuestra sociedad actual. El abuso sexual infantil es un problema que aqueja a miles de personas sin distingo de raza, sexo, religión, estatus social y económico. Una experiencia traumática que muchas veces es callada y, por ende, nuca logra tratarse en la niñez cuando ha ocurrido. Por supuesto, pretender que nada ha pasado no hace que el tiempo se regrese y se evite que suceda un acto tan aborrecible. Por el contrario, lo que hace es que muchas áreas de la vida futura del sobreviviente de abuso sexual, sean afectadas de forma muy negativa.
En ¿Cómo sanar el abuso sexual infantil no elaborado? veremos lo terrible de las experiencias de los sobrevivientes al abuso infantil, cómo la no elaboración adecuada de este trauma ha afectado sus vidas y qué técnicas pueden ayudar a superarlas ahora que ya es adulto.
Abuso sexual o violación pueden ser perpetrados a cualquier edad, y convertirse en un trauma terrible. El hecho de forzar la intimidad sexual, es un acto ultrajante que deja a la víctima no solo con secuelas físicas. Cuando esto sucede en la niñez, hace que muchas fases del desarrollo futuro de la víctima se vean afectadas de forma muy negativa, creando conductas de defensa que simplemente le harán llevar una vida disfuncional en muchos sentidos.
No siendo suficientemente desgarrador y aberrante la violación de un niño o una niña, lo más terrible del caso es que muchas veces quien se convierte en el perpetrador de semejante acto es un familiar o alguien de confianza para la familia. Esto hace aún más difícil para el niño o niña abusada, poder acusar a su victimario, pues en su joven mente puede creer que su acusación será desestimada, o catalogada como mentira: Desafortunadamente muchas veces esto último llega a suceder, haciendo que el niño o niña se sienta indefensa y sin ningún apoyo.
Como podemos inferir con esto último que hemos dicho, la falta de una elaboración efectiva de un proceso de sanación ante el abuso infantil, no siempre ocurre porque la víctima calle su daño, sino que simplemente su versión es desestimada como algo que se imaginó, simplemente se evita hablar del tema o en el peor de los casos hasta se culpabiliza al menor por el acto donde él ha sido dañado.
Todo esto hace que la persona cree mecanismos de defensa inadecuado, así como guarde rencores que motivaran actos que darán una visión negativa y deformada de la vida y de las personas que la rodeen en el futuro.
Pero esto no tiene por qué continuar así. De hecho, el que no se haya elaborado de forma efectiva un proceso de sanación en la infancia -responsabilidad directa de los que eran cuidadores del menor- cuando se dio el abuso, no implica que no se pueda hacer ahora que ya se es adulto. Por el contrario, muchas veces puedes entender de mejor manera muchos conceptos y la forma en cómo se maneja la mente humana en situaciones traumáticas.
El primer paso para empezar un proceso de sanación es el de reconocer los daños. Seamos claros: muchos de los sobrevivientes de un abuso sexual se han dedicado justamente a sobrevivir y no a hacer un recuento de todos los daños que ha podido recibir a consecuencia del abuso. Pero también debemos tener claro que no podemos reparar algo si no sabemos que está dañado. Por esto, hacer un recuento de los daños es un importante primer paso. Para eso podemos hacer uso del cuestionario ¿Dónde estás ahora?, el cual se divide en varios apartados:
AUTOESTIMA O PODER PERSONAL:
1. ¿Tienes la impresión de que eres malo(a), impuro(a) o sientes vergüenza?
2. ¿Te sientes impotente como una víctima?
3. ¿Te sientes diferente a las demás personas?
4. ¿Tienes la sensación de que hay algo que no está bien en tu interior? ¿algo que si los demás conocieran se alejarían?
5. ¿Has tenido sentimientos autodestructivos o suicidas o de que sencillamente quieres morirte?
6. ¿Te odias?
7. ¿Te cuesta mucho ocuparte de ti? ¿Eres capaz de disfrutar sintiéndote bien?
8. ¿Te cuesta confiar en tu intuición?
9. ¿Te sientes incapaz de protegerte en situaciones peligrosas? ¿Has sido víctima aun de adulto(a) a agresiones físicas y verbales o hasta sexuales?
10. ¿Tienes conciencia de tus propios intereses, valores y objetivos?
11. ¿Tienes dificultades para sentirte motivado(a)?
12. ¿Tienes miedo a triunfar?
13. ¿Eres capaz de realizar las cosas que te has propuesto?
14. ¿Te parece que debes de ser perfecto(a)?
15. ¿Utilizas tu trabajo o tus éxitos para compensar la sensación de incapacidad o carencia en otros aspectos?
SENTIMIENTOS:
1. ¿Sabes reconocer tus sentimientos? ¿Distinguir uno de otros?
2. ¿Te cuesta expresar tus sentimientos?
3. ¿Consideras que los sentimientos son una complacencia o un desenfreno?
4. ¿Te sientes cómodo(a) con la rabia? ¿Con la tristeza? ¿Con la felicidad? ¿Con la tranquilidad?
5. ¿Te sientes confundido(a) la mayor parte del tiempo?
6. ¿Sientes una gran variedad de emociones o solo unas pocas?
7. ¿Eres propenso(a) a la depresión, a las pesadillas, a los ataques de pánico?
8. ¿Te ha preocupado la idea de estar volviéndote loco(a)?
9. ¿Le tienes miedo a tus sentimientos? ¿Sientes que siempre están descontrolados?
10. ¿Alguna vez has expresado tu enfado con violencia o maltrato?
EL CUERPO:
1. ¿Hay veces que sintieras la sensación de estar fuera de tu cuerpo?
2. ¿Consumes alcohol, fármacos, drogas o alimentos de forma en que puedas preocupar a los que te rodean o a ti mismo(a)?
3. ¿Sientes en tu cuerpo toda una gama de sentimientos? ¿O a veces te insensibilizas?
4. ¿Notas los mensajes que envía tu cuerpo -hambre, temor, cansancio, dolor-?
5. ¿Te cuesta tener relaciones sexuales y aceptar tu cuerpo? ¿Te sientes a gusto con él?
6. ¿Tienes alguna enfermedad física que creas esté relacionada con el abuso sexual que sufriste?
7. ¿Disfrutas empleando tu cuerpo en actividades como el baile, los deportes o excursiones?
8. ¿Te has causado daño a ti mismo(a) o has maltratado tu cuerpo intencionalmente?
INTIMIDAD:
1. ¿Te resulta difícil confiar? ¿Tienes amigas y amigos íntimos?
2. ¿Te puedes imaginar una relación?
3. ¿Te cuesta dar y recibir cariño y cuidados? ¿Ser afectuoso(a)?
4. ¿Le tienes miedo a la gente? ¿Te sientes marginado(a) y solo(a)?
5. ¿Eres propenso(a) a relacionarte con personas que no te convienen o que no están libres?
6. ¿Te has relacionado con alguien que te recuerde a tu agresor(a)?
7. ¿Tienes la sensación de que suelen aprovecharse de ti?
8. ¿Te parece que tus relaciones simplemente no funcionan?
9. ¿Te resulta difícil comprometerte en la amistad o relación? ¿Sientes pánico cuando las personas se acercan a ti?
10. ¿Encuentras que eres capaz de intimar con amigos(as) pero no pareces lograr que funcionen las cosas con tu amante o pareja?
11. ¿Te aferras a las personas que quieres?
12. ¿Pones a prueba repetidamente a las personas?
13. ¿Supones que las personas te van a abandonar?
14. ¿Sabes decir que no?
SEXUALIDAD:
1. ¿Eres capaz de estar presente mentalmente mientras tienes relaciones sexuales? ¿O lo haces sin sentir o con miedo?
2. ¿Tratas de satisfacer con las relaciones sexuales necesidades no sexuales? ¿Puedes aceptar cariño de otras maneras?
3. ¿Te sorprendes evitando la relación sexual o buscando relaciones sexuales cuando no las deseas? ¿Sabes negarte?
4. ¿Tienes la impresión de que tu valía es principalmente sexual?
5. ¿Eres sexual con parejas que te respetan? ¿Has tenido parejas que han abusado de ti, pregunta específica para mujeres, pero si eres hombre y te ha sucedido puedes responder?
6. ¿Has utilizado tu sexualidad para obtener réditos materiales o has sido explotado(a) sexualmente?
7. ¿Sientes placer sexual? ¿Deseo sexual? ¿Crees que el placer es algo malo?
8. ¿Piensas alguna vez que la relación sexual es sucia y te sientes mal por disfrutarla?
9. ¿Te excitas con fantasías violentas, sádicas o incestuosas?
10. ¿Te parece que necesitas controlar todo lo relativo a la sexualidad para sentirte seguro(a)?
11. ¿Te asaltan alguna vez imágenes intrusivas del abuso sexual?
12. ¿Tienes sexo porque lo deseas o porque ti pareja lo desea?
13. ¿Alguna vez has abusado sexualmente a alguien?
Los hijos y su educación:
1. ¿Te sientes incómodo(a) o asustado(a) cuando estas cerca de niños?
2. ¿Has dado maltrato o temido que podrías maltratar?
3. ¿Te cuesta establecer límites claros con los niños? ¿Equilibrar tus necesidades con las suyas?
4. ¿Te cuesta intimar o estar muy próximo(a) a tus hijos? ¿Te sientes cómodo(a) siendo afectuoso(a) con ellos?
5. ¿Has tenido problemas para proteger a los niños que están a tu cuidado?
6. ¿Eres sobreprotector(a)?
7. ¿Les has enseñado a tus hijos a protegerse? ¿Les has hablado abiertamente sobre temas sexuales?
FAMILIA DE ORIGEN:
1. ¿Estás satisfecho(a) con tus relaciones familiares? ¿O son tensas y difíciles?
2. ¿Saben tus familiares acerca de tu abuso sexual? ¿Te apoyan tus familiares?
3. ¿Sientes rabia, inquietud, depresión cuando estas con tu familia? ¿O te sientes invalidado(a)? ¿Has sido rechazado(a) por tu familia?
4. ¿Has confrontado a tu abusador o les has contado a otros familiares lo de su abuso?
5. ¿Te sientes segura y a salvo cuando estas con tu familia?
6. ¿Esperas que tus familiares cambien? ¿Qué se ocupen de ti? ¿Qué comprendan tu punto de vista? ¿Qué te crean? ¿Vives con la esperanza?
7. ¿Sigue habiendo incesto en tu familia?
Puede que esta cantidad de preguntas se te hagan muy difíciles de responder o que sientas que es muy pesado emocionalmente. Pero el responderlas te dará una visión global y exacta de donde estás en tu vida y cuando ha influido el abuso sufrido en todos estos aspectos.
No es necesario que contestes todas las preguntas de un solo golpe, pero si es necesario responderlas todas. Tomate todos los días que necesites para contestarlas.