CÓMO USAR LA PSICOLOGÍA POSITIVA PARA MEJORAR TU ESTADO DE ÁNIMO
Por Ana Muñoz
La psicología positiva se centra en el estudio de las fortalezas humanas, nuestros puntos fuertes, aquello que nos haces felices y emocionalmente sanos y equilibrados. Por ejemplo, desde el punto de vista de la psicología positiva, en vez de preguntarte "¿qué puedo hacer para dejar de estar deprimido?", te preguntarías "¿qué puedo hacer para sentirme feliz o para tener una vida más satisfactoria?"
Si deseas utilizar la psicología positiva para salir de una depresión o un estado de abatimiento, apatía, o tristeza, puedes hacer lo siguiente:
1. Adopta un punto de vista optimista. No pienses que si algo puede salir mal, saldrá mal; piensa que si no hay motivos para pensar que saldrá mal, es preferible pensar que saldrá bien. Piensa que las malas rachas no duran para siempre, céntrate en las áreas de tu vida que funcionan bien, ten siempre presentes tus cualidades positivas y tus virtudes, en vez de recordarte siempre tus propios defectos.
2. Crea metas positivas. Proponte ser mejor de lo que eres y cultiva cualidades positivas, como esperanza, gratitud, amabilidad, curiosidad, optimismo, creatividad, perseverancia. Es decir, céntrate en desarrollar tus fortalezas en vez de tratar de arreglar tus debilidades o quejarte por tenerlas.
Crea también metas positivas para mejorar tu vida en general, tus relaciones con los demás, tu trabajo o lo que desees mejorar o cambiar en tu vida. Por ejemplo, proponte conocer gente nueva, apuntarte a algún curso, ir a un gimnasio, formar parte de una ONG, etc.
Olvídate por completo de las cosas malas de las que deseas librarte y piensa tan solo en las cosas buenas que deseas alcanzar.
3. Mantén relaciones positivas. Busca la compañía de personas que te hagan sentir bien, que te acepten como eres, con quienes sea fácil relacionarse y te aprecien. Responde de forma positiva a lo que te digan los demás: alégrate de sus éxitos o su buena suerte y de que compartan sus buenas noticias contigo. Aprende a perdonar y a dejar en el pasado los agravios del pasado. Expresa gratitud a los demás y a la vida en general cuando te sucedan cosas por las que puedes estar agradecido. Desarrolla la autenticidad e integridad personalmente y en tu relación con los demás.
4. Acepta la vida tal y como es, con lo bueno y lo malo. Trata de cambiar lo que deseas y puedas cambiar, pero acepta el presente tal y como es.
5. Fomenta la creatividad en tu vida diaria
6. Desarrolla la resiliencia
7. Disfruta de las experiencias y emociones positivas. Identifica las cosas con las que disfrutas y ve a por ellas. Cuando estés viviendo una experiencia positiva disfrútala sin cuestionarla, sin pensar en el futuro o el pasado, sino tan solo en lo que estás viviendo y sintiendo en cada instante, sin ponerte a pensar que se va a acabar o si vendrá algo malo después. Tan solo vive el momento y disfrútalo plenamente.
8. Cultiva la esperanza. Tener esperanza significa creer que puedes alcanzar aquello que deseas, y es una de las cosas más valiosas que puedes tener en la vida, pues te hace fuerte, te ayuda a superar los malos momentos, te hace seguir adelante cuando parece que no puedes más, te da fuerzas para luchar y te aporta una sensación de calidez interior y felicidad. Sigue el enlace anterior para sabe cómo aumentar la esperanza.
CÓMO USAR LA PSICOLOGÍA POSITIVA PARA ALCANZAR TUS METAS O CAMBIAR TU VIDA
La psicología positiva puede servir como una guía que te indica cuáles son los comportamientos, actitudes, valores, formas de pensar, etc., que debes desarrollar para ser más feliz y llevar una vida más satisfactorias en todos los sentidos.
Para ello, has de empezar por tener presente un principio muy simple: lo que das a los demás o al mundo es, por lo general, lo que recibes; es decir, si eres amable con los demás, tendrás muchas más probabilidades de que los demás lo sean contigo.
Si eres una persona positiva, no solo te rodearás de gente positiva sino que, además, las personas más positivas suelen tener mejores trabajos, mayores ingresos, relaciones más satisfactorias y mejor salud.
Por supuesto, esto no significa que, si eres una persona positiva, no te vaya a pasar nunca nada malo. Nadie está libre de los malos momentos o el sufrimiento. Sin embargo, ante las malas experiencias, las personas más positivas reaccionan también de modos más positivos. Es decir, no ven catástrofes sino inconvenientes o problemas, buscan soluciones, piden ayuda si la necesitan y utilizan la experiencia como indicio de que deben cambiar algunas cosas y para aprender y crecer.
Las personas positivas
Las personas positivas a las que me refiero en este artículo serían aquellas que cultivan en un alto grado las características que estudia la psicología positiva (las llamadasfortalezas del carácter) y que ayudan a las personas a tener vidas más plenas y satisfactorias. Algunas de las características de estas personas serían:
- Las personas más positivas se preocupan por sí mismas y por satisfacer sus deseos, pero también se preocupan por los demás, no son egoístas, se esfuerzan por conocer a los demás, sus opiniones, sus sentimientos o las cosas que valoran, y procuran ser justos y amables con los demás. Eso hace que sean especialmente valorados por otras personas, se sientan queridos y cuenten con gente que les ayude en momentos difíciles. Al fin y al cabo, suelen recibir lo que dan.
- La mayor autoconfianza de las personas positivas hace que sean más autosuficientes y que crean más en su capacidad para afrontar los tiempos difíciles o solucionar sus problemas, y no suelen venirse abajo con facilidad ante los reveses de la vida. Es decir, tienen una imagen positiva de sí mismos, viéndose como capaces y competentes. Eso hace que se asusten menos ante los problemas de la vida que la persona que se ve a sí misma como incompetente e incapaz de afrontarlos.
- La vitalidad y el entusiasmo son cualidades que suelen formar parte también de las personas más positivas. Son optimistas y aman la vida, saben disfrutarla, saben divertirse, vivir, descubrir, aprender y sacar partido de lo que la vida puede ofrecerles. Eso hace que sean más felices.
- Las personas más positivas tienen también una mejor relación consigo mismas, y con sus emociones, pensamientos y conductas, se esfuerzan por conocerse y saber lo que sienten, se aceptan como son, tienen una buena capacidad para regular sus emociones y se relacionan bien con ellas, en vez de temerlas o verse dominados por ellas.
- Las personas positivas establecen metas realistas y se implican en ellas a todos los niveles: pensamientos, conductas, emociones. Además, son más perseverantes, lo que hace más probable que no abandonen al primer obstáculo y que, como consecuencia, alcancen sus metas. Saben lo que quieren pero no se limitan a desearlo o a soñar, sino que crean un plan de acción para conseguirlo y lo siguen aunque sea duro y aparezcan obstáculos.
Todo esto no es simplemente un modo de ser con el que algunos tienen la suerte de nacer, sino que son modos de comportarse, de pensar, de actuar o de ver la vida que pueden aprenderse y desarrollarse.