Alguien preguntó a Lie Tse: "¿Por qué valoras el vacío?"
Lie Tse respondió:
A la mayoría de las personas les gusta ser elogiadas. Se sienten bien cuando sus logros son reconocidos. Sin embargo, pienso que nos sentiríamos mejor si estuviéramos libres de apegos y no aprisionados por el reconocimiento, la aprobación y la desaprobación. A largo plazo, tendríamos menos cosas de las que preocuparnos. Por este motivo es por lo que valoro el vacío.
Lie Tse hizo una breve pausa y continuó diciendo:
Incluso si se os atribuye haber hecho algo, debéis daros cuenta de que eso no es una acción totalmente vuestra. Los acontecimientos suceden porque las condiciones son adecuadas, y vuestra acción solo contribuye como una más de las muchas condiciones.
Estamos acostumbrados a pensar que cuando las cosas suceden, son el resultado de nuestros logros; no entendemos que no hay nada realmente que realizar. Por ello, en lugar de aceptar un mérito que no pertenece a nadie, ¿por qué no tranquilizarse y pensar en las obras del cielo y de la tierra?
Ver el vacío de las cosas puede ayudarnos a cultivar la tranquilidad y la paz de espíritu. Si no sabéis cómo manteneros tranquilos en este loco mundo, os ahogaréis en todo tipo de problemas innecesarios. Perderéis vuestra visión del Camino y. cuando os deis cuenta de ello, será demasiado tarde, ya que al perder el Camino, también os habréis perdido vosotros mismos.