HUIR ES UNA MALA DECISIÓN
En mi opinión, esa reacción mitad humana y mitad cobarde de salir huyendo cuando nos enfrentamos a una situación que no es de nuestro agrado no nos beneficia de ningún modo… y sí nos perjudica.
Entiendo -y hasta recomiendo- aplazar la toma de algunas decisiones si uno se da cuenta de que no está en un momento de clara objetividad, si cree que su estado alterado le puede llevar a encontrar soluciones erradas por nacer de la desesperación, del miedo, de la impaciencia, o del desconocimiento, así que si se puede esperar un poco es muy recomendable no hacer las cosas “en caliente” si no estamos absolutamente seguros.
Huir es aplazar los asuntos a resolver. Es una mala decisión.
Resolver implica afrontar y buscar la solución.
Huir del conflicto es autorizar a que ese “lo que sea” siga estancado o creciendo mientras que no se resuelve por falta de responsabilidad.
Vivir implica tanto disfrutar de las partes agradables de la vida como de aquellos obstáculos puntuales que hay que solucionar para que no sigan incordiando. Y así hay que hacerlo.
Todo lo que ocurre parece que ocurre por algo y para algo, y aceptar y asumir esto hace más fácil superar los malos momentos sin huir.
Las huidas tienen algo de lo que no se suele ser muy consciente, y es el hecho de que cuando uno huye no lo hace de los problemas sino de sí mismo. Huye porque no se siente seguro en la situación que se le ha presentado. Huye porque no quiere afrontar las consecuencias de una decisión no acertada. Un poco de amor propio –aunque es mejor si es mucho en vez de poco- ayuda a asumir las consecuencias.
Y la contrariedad de las huídas es…que cuando se llega al lugar de destino uno y sus asuntos también están allí, con lo que no se resuelven alejándose, sino que siguen vivos y a nuestro lado.
En la vida se van a presentar, sin duda, situaciones ásperas que no van a ser fáciles ni de nuestro agrado. Conviene tener claro que hay que afrontarlas, que hay que resolverlas, que no hay que huir. Y enfrentarse a eso forma parte de vivir.
Busca soluciones en vez de buscar modos de huir.
Te dejo con tus reflexiones…