¿QUÉ ES LA TRISTEZA?
La tristeza es una emoción humana, que todos experimentamos alguna vez. Forma parte del conjunto de emociones que la psicología define como básicas, junto con la alegría, el miedo y la ira. La tristeza también está estrechamente relacionada con nuestra autoestima y nuestra salud, ya que se ubica en nuestro cerebro tal como el dolor. Normalmente, cuando lo que causa la tristeza (dificultades, una pérdida, decepciones, etc.) deja de existir o cuando somos capaces de superar esa causa, esta desaparece. Salvo que la razón por la cual estamos tristes este en nuestro interior.
• Emoción básica
• Todos la sentimos alguna vez
• Reacción ante acontecimientos externos
• También se relaciona con la autoestima
DIFERENCIA ENTRE TRISTEZA Y DEPRESIÓN
Mientras que la tristeza es una emoción natural, la depresión una enfermedad mental que nos sitúa es un estado de decaimiento profundo que afecta a toda nuestra salud, nuestros pensamientos, emociones y percepciones. Cuando estás deprimido te sientes profundamente triste acerca de todas las cosas que te suceden. No requiere que nada malo suceda para activarse. Es un trastorno de nuestra salud mental y a menudo ocurre en ausencia de dificultades.
TRISTEZA Y LLANTO
Llorar es una de las respuestas emocionales con la que estamos equipados. Científicamente puede ser definido como el hecho de liberar lágrimas como respuesta a un estado emocional. El hipotálamo, que forma parte de tu sistema límbico, es el área encargada de las emociones y está estrechamente relacionada con nuestro sistema nervioso. Este sistema es el que controla el llanto, mediante un neurotransmisor llamado acetilcolina, el cual estimula la producción de lágrimas.
TRISTEZA Y CANSANCIO
La depresión y la fatiga crónica pueden provocar que te sientas más cansado, incluso después de haber dormido bien. Aunque es posible padecer depresión y fatiga simultáneamente, se trata de dos cosas distintas. La fatiga crónica es un desorden de la salud física, mientras que la depresión es un desorden salud mental.
La depresión conduce a sentimientos de ansiedad, vacío existencial, desesperanza, falta de autoestima, falta de interés hacia muchas actividades que antes solías disfrutar, comer más de lo necesario o demasiado poco, problemas para tomar decisiones o mantener la concentración. Hay asimismo otros trastornos psicosomáticos tales como dolores de cabezas, calambres musculares, insomnio o malestar estomacal, que pueden surgir como consecuencia.
Por otra parte, hay muchas personas con fatiga crónica experimentan dolores de cabeza, dolor en las articulaciones, sensibilidad de los ganglios linfáticos, dolores musculares y dolores de garganta.
Si estás deprimido es habitual sentir cansancio y desinterés hacia cualquier actividad, con independencia del esfuerzo que esta requiera. Mientras que si tienes fatiga crónica, normalmente querrás participar en distintas actividades pero el cansancio físico te impedirá poder hacerlo.
Desafortunadamente, hay personas que sufren fatiga crónica que menudo también se deprimen más, y viceversa, aquellos que sufren depresión son más propensos a padecer fatiga crónica, entrando en un círculo vicioso del cual puede ser difícil escapar.
Al margen de visitar a tu médico, si sufres depresión o fatiga crónica es necesario que comiences a poner en práctica hábitos de vida saludables:
• Ve a la cama a la misma hora todas las noches
• Crea un entorno que propicie el descanso (oscuridad, silencio, temperatura de la habitación adecuada, etc.)
• Evita dormir siestas muy largas. Lo ideal son aproximadamente 20 minutos.
• Evita bebidas que puedan perjudicar el descanso, tales como el alcohol, la cafeína o el tabaco.
TRISTEZA POR AMOR
El amor es un una emoción que puede ser breve o duradera, y que puede ser causa de desasosiego en el caso de la pérdida de la pareja. Una relación de pareja es aquella en la que dos personas se relacionan, y en la cual al menos uno posee un sentimiento muy fuerte hacia el otro. Si alguno falla en la relación, o la pareja se rompe untilateralmente, al otro le puede invadir una profunda tristeza que lo deja sin autoestima e incluso sin fueras para vivir.
TRISTEZA Y SOLEDAD
La soledad es uno de los estados más frecuentes que nos puede suceder a los seres humanos en la vida. La falta de compañía puede producir que nos sintamos solos y tristes. Este sentimiento y falta de contacto con otras personas puede ser consecuencia de distintas situaciones, ya sea por decisión propia, pues se siente triste y no siente deseos de vincularse con ninguna pareja, o simplemente porque le gusta y disfruta estando sin ningún tipo de compañía.
TRISTEZA Y NOSTALGIA
La nostalgia se muestra como una melancolía triste producida por el recuerdo de una pérdida. Cuando hablamos de nostalgia, por lo general nos referimos a la sensación que invade a la mayoría de las personas, que por algún motivo tienen que tomar la decisión de irse de su ciudad o parías distinto para comenzar una nueva vida en un lugar diferente.
TRISTEZA Y MELANCOLÍA
La melancolía se refiere a ese estado anímico desde el cual las personas sienten una profunda tristeza constante, que prevalece sobre las emociones positivas. La persona que se siente invadida por la melancolía, sin ánimo hacia el futuro y no puede deleitarse con las cosas de la vida presente. Este sentimiento se puede presentar en distintos momentos de nuestras vidas y en situaciones determinadas, sin convertirse en algo persistente.
TRISTEZA Y RABIA
La rabia es un tipo de enfado que generalmente no sabemos emitir de manera positiva y terminamos teniendo esta emoción tan destructiva en nuestras vidas, y aunque dentro de cada cosa buena exista algo malo y dentro de cada cosa mala exista algo bueno, no podemos percibirlo así. Las situaciones que nos hacen sentir rabia son esas en las que sentimos que la vida o alguna persona es injusta con nosotros. Con esto, no queremos decir que la rabia o ira sea buena. Pero, sino que es una sensación común en los seres humanos, aunque no imprescindible.
TRISTEZA Y ANGUSTIA
La angustia tiene que ver con ese estado afectivo con características de pena, que puede perjudicar a cualquier persona y que se puede manifestar por lo general como la primera reacción ante un peligro o una impresión. Las personas que están afectadas por ese estado anímico pueden no saber resolver y/o manejar ciertas situaciones de la vida diaria.
TRISTEZA Y FURIA
La furia se refiere a ese estado emocional que perjudica a los individuos y se caracteriza por la demostración de una fuerte ira contra algo o alguien. Es decir, las personas que sienten furia se sienten excesivamente irritables y se evidencia en su forma de hablar y su andar. Por eso, es común que grite y muestre señales de la furia que lo invade. Naturalmente, la furia es una forma que tenemos los seres humanos de reaccionar hacia un peligro, amenaza, o daño sobre nosotros o nuestro entorno, pero que hemos de aprender a gestionar.
TRISTEZA Y ENOJO
Se trata de ese sentimiento desagradable que tenemos los individuos cuando estamos insatisfechos o precipitados por las palabras, acciones o actitudes de otros. El enojo nos predispone el ánimo ante otra persona o contra una circunstancia en particular que nos parece desagradable o injusta. De este modo, las causas del enojo pueden ser internas o externas. Son internas cuando las notamos dentro de nosotros mismo, o externas cuando tienen que ver con situaciones que suceden a nuestro alrededor.
TRISTEZA Y DECEPCIÓN
La decepción tiene que ver con esa sensación o sentimiento, tan común entre los seres humanos y que se refiere particularmente en sentirse insatisfecho cuando esperábamos algo mejor o lo que esperábamos que pasase no ocurre, o no ocurre de la manera que deseábamos. Pero, no solo se refiere a planes o situaciones, también podemos decepcionarnos cuando alguien que creíamos que era buena persona no cumple con las expectativas que teníamos en ella.
TRISTEZA Y DESESPERACIÓN
La desesperación es un estado emocional contrario a la esperanza, y se trata de una forma de sentirnos tristes de manera intensa. Por ejemplo, el suicidio es la demostración más evidente dela desesperación. Sin embargo, antes de llegar allí, el individuo pasa por una serie de estados emocionales relacionados con la desesperación, en donde la persona se siente mal, cansada, con el ánimo bajo, mucha rabia y negatividad hacia la vida. Es un sentimiento muy común entre los seres humanos, pero al ser muy profunda y vincularse con otras emociones negativas, puede ser destructiva y poner en peligro la vida misma. Aunque es natural sentirse triste en ocasiones, hemos de tener cuidado si se convierte en algo persistente que te aleja de la felicidad, y buscar ayuda profesional de la psicología en ese caso.
Hemos de comprender esta emoción, y tener en cuenta que tenemos a mano muchas herramientas para gestionarla y vivir mejor y más felices nuestro día a día.