CÓMO TRANSFORMAR LA IRA REPRIMIDA EN PODER DE ENERGÍA
La ira es energía. Es un sentimiento que forma parte de nuestra vida emocional. La ira puede convertirse en tu peor enemigo, te produce negatividad y puede debilitarte la salud. Cuando la ira se entiende y la transformas puede convertirse en tu mejor aliado para sanar y encontrar la paz personal.
La ira es una de las más incomprendidas y comúnmente emociones reprimidas, al entender la verdadera naturaleza de la ira, puedes empezar a aprovechar esa pérdida de potencial de tu voluntad. La fuerza de voluntad es la clave para crear cambios permanentes, y positivos en su vida. Todo depende de cómo te relacionas con tus emociones. Antes de explorar la ira trasformada es importante aclarar las emociones negativas y positivas.
Las emociones son un sistema de retroalimentación que ofrece orientación en nuestra vida cotidiana. Nos informan de lo que tenemos que hacer para sentirse seguro y pacífico. En la infancia aprendimos a juzgar nuestras emociones y las colocamos en dos categorías: positivas (buenas) o negativas (malas). Cualquier sentimiento que sea frío (como el miedo, la culpa y la soledad) es como algo negativo y malo. Las emociones afectuosas (como el amor, la alegría, y la felicidad) fueron identificadas como positivas (buenas). El reto para usted es redefinir su relación con todas sus emociones y cambiar la forma de relacionarse con ellas. Aquí les diré como hacer eso:
Cuando consigues redefinir tus emociones experimentas una sensación de poder. Las emociones negativas son las emociones (el amor o el miedo) a las que no les haces caso, niegas y reprimes. A pesar de sus nombres, todas las emociones se convierten en negativas cuando se niegan a sentir y expresar.
Eventualmente, a todos nos explota las emociones reprimidas en cólera, ya sea con la rabia hacia adentro o hacia afuera, y lo pagamos con los que más cerca está de nosotros, ya sea nuestra pareja, nuestros padres o familiares. Es la represión de la emoción que provoca su destrucción, no la emoción misma. Del mismo modo, el amor que es reprimido puede ser tan destructivo como la ira. Las emociones es la energía que necesita ser sentida y expresada con respeto.
Las emociones positivas son una emoción que el honor (propio), debe sentir, expresar y liberar apropiadamente. Cuando respetas tu enojo tanto como el amor, ha madurado su inteligencia emocional y comienza a tener domino sobre tu vida.
Hemos sido el cerebro lavado de la niñez a juzgar la ira como una emoción mala. Al igual que todas las emociones, la ira tiene la intención de ser sentida, expresada y puesta en libertad… adecuadamente la ira reprimida siempre tiene un impacto negativo en nuestras vidas. Adicciones, preocupación, inseguridad, impotencia, aumentan cuando la ira se reprime. Asimismo, dentro de toda ira no es un recurso oculto de fuerza de voluntad. La energía necesaria para poner fin a la dilatación y tomar las riendas de tu vida se encuentran al explorar y liberar tu ira.
CÓMO CREAR UNA SANA RELACIÓN CON LA IRA
Es importante reconocer el valor tanto de su constricción y la ampliación de las emociones. El objetivo de la ira es ofrecer retroalimentación. La ira es un mensajero, su misión es comunicarte que el cambio es necesario. Por ejemplo, si sientes rabia hacia una persona, entonces algo acerca de esa relación tiene que cambiar. Tal vez no estás siendo respetado ni entendido. Fingir que no estás enojado aumenta solo la negatividad.
Ser honesto con uno mismo es la clave para aprovechar el poder de tu naturaleza emocional. Al dejar de lado tu buen juicio y honestidad, sentir tus emociones y tu dolor que da gusto expresar y ponerlo en libertad. Entonces, la energía atrapada en el interior puede convertirse en una fuerza constructiva en tu vida.
CUATRO PASOS PARA TRANSFORMAR LA IRA REPRIMIDA EN FUERZA DE VOLUNTAD:
El primer paso: asumir la responsabilidad de su enojo y comenzar a sentir. Esto te permite conectar con la causa y comienza a transformarla en una experiencia positiva. Al darse cuenta de esta verdad simple que puedes comenzar a levantar la ira de su estado destructivo y reprimido.
El segundo paso. Exprese su enfado por escrito. Tome un poco de papel y escriba en la parte superior de la página, “yo y mi ira”. Escribe lo primero que te viene a tu mente acerca de la ira. Escribe en un estilo libre de asociación. No te preocupes por la gramática la estructura de las oraciones o de la ortografía. Expresa tu ira escribiendo sus pensamientos y sentimientos.
Por ejemplo, podrías empezar a escribir “este ejercicio es una estupidez. No creo que estoy haciendo esto. Tratar de escribir mi enojo es tan frustrante… Me siento atrapado, Estoy agobiado con el trabajo… bla, bla, bla.”
Deja que los pensamientos y sentimientos salgan, no hay que valorar o juzgar sus palabras. Esto puede hacer que se sienta incomodo al principio, pero pronto comenzara a fluir de ti una corriente de conciencia.
Después de 20-45 minutos los sentimientos atrapados se desplazarán y accederás a una sensación de paz interior. Cuando eso ocurre hay que destruir el papel. A continuación toma un descanso y haz algo que disfrutes. Relájate en un baño caliente, salir a caminar, disfrutar de tu película favorita, hacer algo divertido. Esto te ayudara a escalar más allá de estos sentimientos en un espacio más amplio. Date al menos 2 horas hasta 24 de relax antes de pasar al tercer paso.
El paso tercero. Exprese su enfado con imaginación. Este es un paso importante para liberar tu mente. Se trata de utilizar tu imaginación para desenganchar la negatividad de tu mente subconsciente. Tu mente subconsciente no sabe la diferencia entre algo que imaginas y algo que realmente sucede.
Por ejemplo ¿alguna vez te sentaste en una sala de cine y viste una película de miedo, la cual te hizo sentir miedo o ansiedad? Lógicamente, sabias que estabas seguro por que estabas rodeado por un centenar de personas. Sin embargo, tu mente subconsciente no distingue de las imágenes en la pantalla de lo que realmente en ese momento está sucediendo. Así es como actúa la conexión cuerpo-mente. Tu mente subconsciente no sabe la diferencia entre lo que imaginas y lo que físicamente te está sucediendo.
TÉCNICA DE IMAGINACIÓN GUIADA PARA LIBERA LA IRA REPRIMIDA
Cierra los ojos e imagina a la persona con la que estas enojado de pie delante de ti. Esta persona pudo haber muerto hace mucho tiempo, podría ser un jefe, un padre, un amigo, o alguien que no te gusta. Diles en tu mente lo enojado y molesto que estás. Ahora es tu oportunidad para evaluar la energía reprimida de su mente subconsciente.
Consejo: Si te es difícil expresar la ira de cuando eras niño, deja que tu niño interior exprese sus sentimientos. Deja que el enojo esté a un lado, no lo vivas en primera persona, piensa en tu hijo o un adolescente y utilízalo en tu imaginación para que expreses los sentimientos que nunca habías puesto en libertad.
Puedes estar preocupado de que si desahogas tu ira en la meditación, puedes pensar que estas enviando energía negativa de alguna manera a la persona con quien estás enojado. Recuerda que tu intención es transformar la ira en energía positiva. Una vez que tu mente subconsciente haya ventilado su enojo, es fácil perdonar y dejar ir. Deja que la ira no se detenga.
El cuarto paso. Perdona a cualquiera que te enojó. Perdónalos y déjalos ir. Una vez más puedes hacer esto en tu imaginación, Simplemente imagina en tu mente y diles “yo te perdono” no tienes que hablar con ellos físicamente, sino efectivamente puedes perdonar en tu mente, allí donde realmente importa. El perdón será fácil una vez que la ira ha desparecido de tu mente.
Si tienes dificultad para perdonar, vuelve a atrás y mira a ver si hay más enojo que aún necesite de su liberación. Una vez que los ha perdonado, para hacer positiva esta experiencia negativa. Visualiza cómo te quieres sentir y ser. Imagínate a ti mismo de nuevo en el flujo, dotado de poder y siéntete grande y renovado. Como te sientas finalmente es lo que conseguirá aportarte al final bienestar a tu vida.
Fuente: El despertar interno