NADIE VIVIRÁ TU VIDA
En mi opinión, VIVIR es una hermosa tarea a pesar de que algunas veces se complica un poco y nos muestra una cara poco agradable.
No hay que olvidar, y esto es muy importante, que tu vida es, sobre todo, TU RESPONSABILIDAD. Y esta responsabilidad ha de ser ineludible.
No estoy de acuerdo con las personas que derrochan inútilmente su vida –realmente estoy muy en contra-, con las que viven de un modo inconsciente y se pierden la maravilla de VIVIR una vida plena, con las que lo dejan todo en manos del destino o de la casualidad, o las que piensan que el azar o la fatalidad son determinantes en su vida, ni con aquellas que permiten que otros –sean quienes sean- se inmiscuyan en su vida y la manejen a su antojo, o reciban tantas órdenes o imposiciones de los otros que no vean la opción de desobedecerlas y hacerse cargo en solitario de su propia vida. Estos últimos son peligrosos y conviene evitarlos.
Nadie vivirá tu vida… afortunadamente.
Así está más preciso y completo el título. Porque es tu tarea exclusiva, y si estás en un Proceso de Desarrollo Personal ya sabrás que el aprendizaje que te corresponde tener proviene, principalmente, de vivir tu vida y las experiencias que te sean necesarias.
Nadie vivirá tu vida… por ti.
VIVE intensamente, conscientemente, poniendo atención en TODO y observarás que las cosas adquieren una preponderancia que tal vez antes no eras capaz de apreciar. La vida con atención es más vida.
Nadie vivirá tu vida…porque es tuya.
Marca tus reglas y pon barreras o frenos para que otros no interfieran. Para bien o para mal, tu vida es tu vida. Manda en ella. Escoge y decide. Cuando te toque morir nadie lo hará por ti, así que ahora que te toca vivir que nadie lo haga por ti.
Recuerda que el sentido principal de la vida es VIVIR. Habrá otros, pero siempre estarán relacionados con éste.
VIVIR no es lo que hacemos todos los días de un modo inconsciente: lo que hacemos es movernos y respirar.
VIVIR requiere tener una actitud insobornable ante la vida, una gran determinación para afrontarla con lucidez y atención, ganas, constancia de ánimo, claridad en los objetivos y determinación para hacer lo que hay que hacer.
Tu vida es tu vida. Y esta frase es mucho más profunda de lo que aparenta, porque por no ser conscientes de su magnificencia a veces la derrochamos en inutilidades, o en complacencias –que son evitables- a otras personas que nos la roban sin que hagamos nada por defendernos.
Cada vez que la sensación de estar “perdiendo el tiempo” pase ante nuestro pensamiento conviene hacer un alto, dejar todo a un lado y dar preponderancia a este aviso: nos está proponiendo una revisión completa y exhaustiva de nuestra vida y de lo que estamos haciendo o lo que no estamos haciendo con ella y en ella.
El asunto de este artículo es uno de los más importantes que hay en la vida. Requiere que lo atiendas bien.
Tu vida –el modo de VIVIR o no tu vida- está en juego. No pierdas la oportunidad única e irrepetible de vivirla.
Te dejo con tus reflexiones…