APROVECHEMOS LO BUENO DE LO MALO
En mi opinión, todas las personas hemos pasado o pasaremos por momentos de esos que podemos resumir clasificándolos como… “muy malos”.
Parece que son inevitables. Y ya sabemos lo que nos aportan: sobre todo dolor, pero también caos personales, confusiones mentales, miedos, dudas, desilusiones, llantos, incomprensión, sufrimientos, etc.
Aparentemente, nada positivo y sin duda desearíamos no tener que pasar por ellos. No son agradables. No tienen ninguna gracia.
Pero están, suceden y nos involucran. Bastantes de ellos son inevitables porque no dependen de nosotros aunque nos acaben afectando.
Quedarse simplemente en la rabieta, en el desconsuelo, en el dolor, o en el llanto, no nos aporta nada positivo.
Las situaciones vividas, para que nos aporten algo positivo –que sería lo único que de algún modo podría justificar su existencia-, es conveniente revisarlas desde un punto de vista práctico.
Será realmente beneficioso si hacemos esto:
PREGUNTARNOS EL PORQUÉ Y EL PARA QUÉ de lo que ha sucedido.
SACAR EL APRENDIZAJE QUE SE PUEDA, porque siempre se puede aprender algo.
TOMAR DECISIONES PARA APLICAR EN LA PRÓXIMA OCASIÓN que nos suceda lo mismo o algo parecido.
VER A QUIÉN HA AFECTADO LO SUCEDIDO, si ha sido a nuestro ego, a cualquiera de nuestros múltiples yoes, o al Ser.
COMPROBAR SI LO OCURRIDO HA SIDO UN ESPEJO que nos ha permitido vernos como realmente somos.
RECONOCER SI HEMOS SALIDO FORTALECIDOS O HUNDIDOS y por qué.
VERIFICAR SI NUESTRA ACTITUD HA SIDO LA QUE NOS PARECE APROPIADA o si tenemos que hacer modificaciones en nuestro modo de ser, de actuar o de pensar.
Se supone que las personas que estamos en un Proceso de Mejoramiento Personal somos sensibles a tener en cuenta las experiencias que la vida nos procura y creemos que tienen algún sentido. No creemos que el sufrimiento que nos provocan sea gratuito, como un castigo, sino que suponemos que son experiencias que tenemos que atravesar en el enriquecedor camino del autodescubrimiento.
Y dado que ya hemos pasado por la experiencia, y hemos visto y padecido su parte menos agradable, no hay mejor opción que la de aprender y sacar provecho.
Aprovechemos lo bueno de lo malo.
Te dejo con tus reflexiones…