LOS SORPRENDENTES BENEFICIOS DE TOCAR A LOS DEMÁS
Pau
Después de unas merecidas vacaciones creo que te debía uno de esos artículos donde trato un tema en profundidad. En este caso prepárate para descubrirlo todo sobre la importancia del contacto físico en tus relaciones sociales. Te aseguro que saldrás con ganas de tocar a todo el mundo.
Se han dicho muchas cosas sobre el contacto físico en el terreno de las habilidades sociales. Algunas son ciertas y otras son falsas, pero desafortunadamente poca gente se ha molestado en entender realmente los efectos reales que el contacto produce y el porqué de los mismos.
Personalmente no me consideraba un gran fan del contacto físico a no ser que se tratase de mi pareja o amigos muy íntimos. Sin embargo, hace poco estaba con un grupo de amigos con los que comparto una alta carga emocional y observé que la forma y frecuencia con la que nos tocábamos era extrañamente alta. Y como no creo en las casualidades, decidí investigar un poco.
Mi conclusión ha sido que, aunque ya sabía de la importancia del contacto físico en las relaciones sociales, la diferencia entre tocar o no tocar puede llegar a tener unos efectos demoledores.
7 MOTIVOS PARA USAR MÁS EL CONTACTO FÍSICO
Si tuvieras que escoger los dos sentidos más importantes para relacionarte con los demás casi seguro que elegirías la vista y el oído, ¿me equivoco?
• Si bien parecen los sentidos dominantes, hay investigadores que defienden que es el tacto el más importante para los humanos. Los primates pasan aproximadamente el 20% de su tiempo tocándose, una conducta en la que depositan casi todas sus funciones sociales, y en los humanos podría incluso tener mayor importancia. No en vano el tacto es el sentido más desarrollado cuando nacemos.
• La tecnología y la sociedad moderna aportan muchos motivos para que no nos toquemos. Vivimos en una sociedad contactofóbica que apenas tolera el contacto entre personas que no sean nuestros seres queridos. Pero, como puedes ver en los documentales del National Geographic, los animales no se comunican, sociabilizan, persuaden, seducen o aparean con palabras, sino con el contacto.
Las últimas investigaciones ya demuestran que cuanto más contacto físico recibas, más saludable física y psicológicamente estarás. A continuación encontrarás algunos de los principales beneficios del contacto físico.
1. MEJORARÁS TU SALUD FÍSICA Y PSICOLÓGICA
Cada vez que alguien te toca amistosamente, multitud de receptores de presión en tu piel envían una señal a tu cerebro para que empiece a reducir la producción de cortisol, la hormona responsable del estrés que inhibe la producción de linfocitos, la primera defensa de tu sistema inmune frente infecciones y enfermedades.
• En un estudio relacionado también se comprobó como mujeres que sufrían de profundos dolores de cabeza mejoraban sustancialmente después de recibir masajes, probablemente porque esas señales de alivio emitidas por los receptores de presión llegan al cerebro antes que las señales de dolor.
• En otra investigación con mujeres se vio que la activación cerebral asociada con la amenaza disminuía antes de recibir una descarga eléctrica si sostenían mientras la mano de su marido. Y en otro ejemplo, los niños que recibieron contacto físico aguantaron más estoicamente una serie de intervenciones médicas.
El contacto también estimula tu sistema nervioso parasimpático, conocido por ser el mecanismo de relajación. Eso provoca que cuando te tocan se liberen hormonas como la serotonina, dopamina y oxitocina, responsables en parte de la sensación de bienestar.
Cuanto más contacto des y recibas, mayores beneficios podrás obtener sobre tu salud: reducirás el estrés, enfermarás menos frecuentemente y te sentirás mejor.
2. COMUNICARÁS MEJOR TUS EMOCIONES
Hasta hace poco, la idea de que la gente puede enviar e interpretar señales emocionales a través del contacto físico parecía poco creíble incluso para los investigadores. Sin embargo, en un estudio de 2009 el psicólogo Matther Hertenstein demostró que, con tan sólo tocar a los participantes del estudio era posible comunicar con un 78% de eficacia hasta 8 emociones: gratitud, miedo, enfado, desagrado, amor, simpatía, tristeza y felicidad.
Hasta entonces los científicos creían que el contacto tan sólo podía reforzar las emociones que se comunicaban mediante el lenguaje verbal y no verbal, pero en este estudio se demostró que por sí solo es capaz de comunicar una gran variedad de emociones.
La cara, por ejemplo tan sólo es capaz de transmitir de forma fiable la alegría como emoción positiva, por lo que el contacto físico parece una forma mucho más precisa de comunicación que las expresiones faciales.
Añade el contacto a tu comunicación para transmitir mejor tus emociones y que la gente empatice y se vincule más contigo.
3. AUMENTARÁS TU CAPACIDAD DE PERSUASIÓN
Éste quizás sea el campo donde más se ha estudiado el contacto gracias a investigadores como el Dr. Guéguen. En sus experimentos se ha demostrado principalmente que tocar a alguien ligeramente en la parte superior de su brazo puede incrementar mucho las posibilidades de que acepte una petición tuya.
1. Es más probable que alguien te dé un cigarro si se lo pides mientras mantienes contacto físico, tal y como se evidenció en este estudio.
2. En una investigación las camareras que tocaron a los clientes al devolverles el cambio recibieron una cantidad significativamente mayor de propinas. A este efecto se le llamó “el toque de Midas”.
3. En otro estudio se comprobó como la gente que acababa de encontrarse dinero en una cabina telefónica estaba más predispuesta a devolverlo a la persona que se lo reclamaba como suyo si ésta les tocaba ligeramente en el brazo.
4. Incluso hay más probabilidades de que un conductor de autobús acceda a que entres sin pagar si le tocas mientras se lo pides (fuente).
5. En un estudio en que se les pedía a los transeúntes que rellenaran un cuestionario el porcentaje que aceptó pasó del 40% al 70% tan sólo añadiendo el contacto a la petición. En otro estudio similar el porcentaje de éxito fue incluso superior al añadir un segundo toque.
Cuando hagas una petición importante para ti intenta acompañarla con un ligero contacto en el brazo u hombro de tu interlocutor para aumentar las probabilidades de que te diga que sí.
4. MEJORARÁS LA IMAGEN QUE LOS DEMÁS TIENEN DE TI
En una investigación de 1976, un grupo de bibliotecarios devolvió las tarjetas a los estudiantes con un sutil toque sobre su mano, mientras que otro grupo lo hizo sin contacto físico. Los estudiantes que fueron tocados evaluaron mucho más favorablemente a los bibliotecarios, incluso cuando eran incapaces de recordar si había habido contacto o no.
Tocar no solo te servirá para persuadir, sino para caer mejor a los demás y mejorar la imagen global que tienen de ti.
Si tocas, pareces más honesto
El cortex insular es una zona cerebral que se activa durante el contacto, pero también durante cuando experimentas confianza. El hecho de que el contacto esté implicado en la confianza sugiere que es crucial para desarrollar relaciones sociales estrechas (fuente).
• En un estudio realizado en Francia, unos vendedores de coches usados se acercaron a sus clientes bien tocándolos en el brazo durante un segundo, bien sin ningún tipo de contacto. Los que recibieron el toque calificaron a los vendedores como más sinceros, amigables, honestos y amables. No está mal para tratarse de un toque que duró un segundo.
• Las personas también son más propensas a ayudarte si les tocas. En otra investigación se demostró como a los desconocidos que se les tocaba ligeramente en el brazo estaban más predispuestos a ayudar a recoger las cosas del suelo a un investigador. En concreto, el porcentaje se incrementó del 63% al 90%.
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Si tocas, incrementas tu estatus social
Parece ser que tocar también proporciona información sobre las relaciones de poder. En un estudio del año 1973 se observó en un entorno laboral como las personas con mayor tendencia a tocar a los demás normalmente tenían un estatus superior. La conclusión es que solemos considerar las persona que mayor contacto físico ejercen como más dominantes en la sociedad.
Aunque no quieras pedir nada, acostúmbrate a tocar a las personas de tu entorno social más próximo para que te vean como alguien más cercano y confiable.
5. AUMENTARÁS TU RENDIMIENTO
En el año 2010 se realizó un estudio a gran escala para determinar si el contacto físico podía estar relacionado con el éxito en un deporte tan profesionalizado como la NBA.
Durante una temporada entera se analizó cada abrazo, choque de palmas y palmada de los partidos de la liga Americana de baloncesto. Las conclusiones fueron que el grado de contacto físico podía predecir con mucha exactitud el éxito de cualquier equipo de la NBA.
Salvo pocas excepciones, los mejores equipos mantenían más contacto físico entre ellos que los peores. Los equipos que más se tocaban eran los Angeles Lakers y los Boston Celtics, mientras que los que menos fueron los Sacramento Kings y los Charlotte Bobcats.
Para descartar la posibilidad de que los mejores equipos se tocasen más simplemente porque iban ganando se tomaron otros factores en consideración aparte de las victorias, y la relación se mantuvo. Incluso entre jugadores, porque los que más contacto hacían con sus compañeros solían aparecer en lo alto de la clasificación.
La explicación de porque un choque de manos o una palmada puede mejorar el desempeño, tanto en el campo como en la oficina, es probablemente porque reduce los niveles de cortisol, permite confiar más en uno mismo, y relaja la parte prefontal del cerebro, liberándola para que se dedique a su tarea principal: resolver problemas.
En otro estudio se comprobó como los participantes que recibieron un par de masajes a la semana durante algo más de un mes obtuvieron mejor puntuación en un test de matemáticas que los que no recibieron masaje alguno.
Si formas parte de un equipo de trabajo o deportivo, intenta instaurar el hábito del contacto entre vosotros para apoyaros mútuamente. Vuestros resultados probablemente mejoren mucho.
6. SEDUCIRÁS MEJOR
A menudo la gente me hace preguntas sobre seducción y sus relaciones sentimentales. Se preguntan porqué no hubo primer beso en la cita o por qué parecía forzado. O por qué nunca existió una segunda cita, o cuál es el motivo por el que no pudieron entrar en un terreno más íntimo.
Hay muchos motivos por los que esto puede ocurrir, pero si todo iba bien hasta entonces la mayoría de veces la respuesta es que hubo poco contacto.
Gran parte de la atracción se crea a través del contacto. Si no tocas a la persona que quieres seducir lo más probable es que esa atracción no termine de consolidarse. Un recurso muy habitual entre los estudiosos de seducción es premiar la chica que se quieren ligar con un “chócala”, incluso aunque sea una tontería lo que haya dicho. Lo que están consiguiendo es empezar a crear contacto físico.
• En el caso de los hombres ocurre lo mismo: su interés hacia la mujer aumenta si ésta los ha tocado ligeramente. El problema es que muchos de ellos malinterpretan un toque accidental sin por parte de la mujer como una muestra de interés sexual (fuente). ¡Así somos! 😉
• En uno de los principales estudios que defienden la importancia del contacto en la seducción, un hombre pidió el teléfono a mujeres en la calle con un sutil toque en la parte superior de su brazo en la mitad de las ocasiones, mientras que en la otra mitad lo hizo sin contacto. En el primer caso obtuvo significativamente mayor porcentaje de éxito, y los investigadores concluyen que puede estar relacionado en que transmitió mayor dominancia y confianza en uno mismo a la mujer.
Hay varios otros estudios que relacionan el contacto con el agrado y la atracción. Lo que parecen indicar es que cuando tocas a otra persona, ésta se siente más atraída por ti.
1. En una investigación del año 1993 se observó como el contacto entre parejas al azar de distinto sexo se relacionaba con un incremento de la frecuencia cardíaca y aumentaba el deseo, especialmente si se acompañaba de contacto visual.
2. Otro estudio demostró como los toques accidentales podían producir sentimientos de atracción, credibilidad, y agrado hacia una persona que ayudaba al participante a resolver un problema.
En general, siempre que toques de forma sutil y evitando molestar, el contacto puede ayudarte a generar sentimientos positivos en la persona a la que deseas gustar.
Cuando quieras seducir a alguien, intenta iniciar el contacto lo antes posible. Aunque sea un toque accidental (cogerle de la mano con la excusa de mirarle el reloj, etc.) ya habrás logrado que el contacto entre los dos se vea como algo natural. Cuanto más tiempo pase antes de que os toquéis, más raro y forzado os parecerá luego.
7. FORTALECERÁS TUS RELACIONES SENTIMENTALES
A estas alturas ya deberías conocer la relación del contacto físico con la liberación de oxitocina, lo que provoca mayor apego por la otra persona y proporciona una sensación de bienestar. Lo más bonito es que no puedes tocar sin ser tocado a la vez, así que si tocas, todos estos beneficios también repercuten en ti. Esto es especialmente importante en las relaciones sentimentales.
Gran parte de la comunicación con la pareja es por el contacto. En un experimento de la Universidad de Harvard donde se entrevistaron a 69 parejas se observó como aquellas donde el contacto físico era más frecuente declaraban mayor satisfacción general en la relación.
De nuevo, no está claro que sucede primero, si el contacto o la satisfacción. De todas formas parece que están muy relacionadas y que el contacto es en gran parte responsable de crear un profundo vínculo entre la pareja.
Sin embargo, el indicador último de que existe una relación sana con la pareja no parece ser tanto la frecuencia del contacto sino en qué medida tu compañero/a te toca en respuesta a él. Cuanta mayor sea la reciprocidad, más grande será la satisfacción e intimidad emocional en la relación.
En otra investigación llevada a cabo por la Dra. Tiffany Field se demostró que un masaje ocasional del ser querido no tan sólo relaja y alivia el dolor, sino que también fortalece la relación.
Si tienes pareja, acostúmbrate a tocarla más. Acaríciala, intercambiaos masajes de vez en cuando, rodéala con tu brazo. Os querréis más.
VIGILA CÓMO TOCAS
Los extremos acostumbran a ser malos. Siempre recordaré la ocasión en que un alumno de un taller de seducción estuvo media hora intentando ligar con una chica en un pub. A la vuelta me dijo que había mantenido un contacto físico muy sensual con ella y que creía que la tenía en el bote.
Sin embargo, cuando el chico se fue al baño ella se acercó a mí y me dijo que se iba porque le había molestado mucho la forma en que mi compañero la había estado sobado todo el rato.
Lo importante por lo tanto es que sepas cuándo y cómo hay que tocar para no romper las normas sociales y ser percibido como molesto o pasado de vueltas. Lo más importante para no meter la pata es lo siguiente:
1. La forma más segura de tocar a alguien que aún no conoces es con un ligero toque en la parte superior del brazo
2. El contexto es clave, y existen diferencias tanto culturales como de género en lo que es aceptable o no
3. En el trabajo siempre es mejor que sea el superior el que inicie el contacto, no el subordinado
4. Hay gente a la que no le gusta que le toquen en ninguna situación social, así que si ves que responde mal al primer contacto no sigas por ahí.
EL PODER DE TOCAR
La gran magia de todos los estudios que te he explicado es que, en la mayoría de ellos los participantes ni tan siquiera eran conscientes de que habían sido tocados. Tan sólo notaban que había una conexión más profunda con la otra persona, y que ésta les agradaba más. Somos animales sociales, al fin y al cabo.
Tocar sirve para gustar más, influir, vincularse con los demás, relajarse, y fortalecer una relación. Recuerda además que los beneficios del contacto son recíprocos: se sabe que las personas que dan un masaje experimentan una reducción en las hormonas del estrés comparable a la persona que lo recibe, y lo mismo ocurre con los abrazos o caricias.
Cuanto más conectes físicamente con los demás, por poco que sea, más contento estarás. Es un hecho. Si no tocas a tus amigos, familiares, o compañeros, probablemente no serán tan atentos o amables contigo.
SI NO ESTÁS TOCANDO, NO TE ESTÁS COMUNICANDO.
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