No preguntes a nadie cómo has de orar. Deja que el momento decida, deja que ese momento sea decisivo y la verdad del momento será tu oración. Y una vez que decidas que la verdad del momento te posea, empezarás a crecer y conocerás la tremenda belleza de la oración. Has entrado en el camino.
Tarot de la transformación de Osho: 23. Plegaria