¿POR QUÉ TE ENAMORAS SIEMPRE DE LA PERSONA EQUIVOCADA?
6 MANERAS DE ROMPER LOS PATRONES
Francisco Fortuño
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¿Sientes que hay patrones que llevan tiempo repitiéndose en la mayoría de tus relaciones sentimentales?
¿Te enamoras siempre de la persona equivocada?
¿Ves ciertos parecidos que no te gustan en todas y cada una de tus parejas?
¿Sientes que tu vida amorosa es una espiral que siempre llega al mismo punto?
¿Tus relaciones están más llenas de ansiedad y frustración que de satisfacción y felicidad?
Si has respondido que SÍ ha alguna de las preguntas es probable que de manera inconsciente estés repitiendo algunos patrones que aprendiste a lo largo de tu vida.
Cuando nacemos somos una pizarra en blanco con una predisposición de los lugares por dónde será más sencillo dibujar con la tiza. Esa predisposición son nuestros genes.
Nuestros genes pueden hacer que se nos dé mejor una cosa que otra, que seamos más susceptibles a tener ciertos tipos de enfermedades o desordenes mentales, que nos gusten más o menos determinadas cosas o que tengamos alguno sentidos más desarrollados que otros.
Sin embargo, nuestros genes solo marcan tendencias, predisposiciones que se pueden modificar mediante experiencias de aprendizaje. De hecho está demostrado que muchos genes solo se expresan cuando están en un ambiente propicio para ello.
Aquí entra en juego la gran importancia del entorno. Desde que nacemos estamos en constante interrelación tanto con nosotros mismos (nuestras propias emociones, pensamientos y sensaciones interoceptivas) como con el mundo que nos rodea (los estímulos del entorno y las demás personas).
Por medio de esta interrelación es como aprendemos qué es lo que debemos pensar, sentir y cómo debemos comportarnos formando progresivamente lo que llamamos personalidad.
Cuando nacemos no tenemos ni idea de qué es una relación sentimental, cómo se construye, cómo se mantiene, o cuáles son los componentes que debe de tener para considerarse satisfactoria.
Las relaciones sentimentales además del componente puramente bioquímico que genera la atracción inicial tienen un claro componente cultural, aprendido.
Es la cultura y el aprendizaje previo lo que determina que puedes esperar de una relación.
Es la cultura la que determina si están aceptadas o no las relaciones entre personas del mismo sexo, la poligamia u otras prácticas sexuales. No se puede determinar si algo es bueno o malo sin tener en cuenta el contexto en el que se da.
Por lo tanto no es de extrañar que el entorno en el que pasamos los primeros años de nuestra vida marque ciertas tendencias y ciertos patrones que puedan predecir qué es lo que vamos a buscar a la hora de elegir una pareja y cuál va a ser el curso de nuestras relaciones.
A lo largo de mi experiencia como psicóloga he tratado con varios pacientes cuyo motivo de consulta era que siempre se veían en vueltos en relaciones conflictivas rozando el maltrato, que siempre salían con personas comprometidas o que sentían atraídos por parejas con una capacidad para el compromiso muy discutible.
Estas personas concluían cosas como que él/las personas del sexo puesto eras todas iguales o que había algo en ellas que nos las hacía licitas de ser amadas.
Sin embargo lo único que estaba ocurriendo es que estaban repitiendo patrones que de manera inconsciente aprendieron en su infancia.
PERO… ¿POR QUÉ REPETIMOS PATRONES QUE CONSCIENTE MENTE SABEMOS QUE NO SON ADECUADOS?
• Porque si de pequeño papá o mamá solo te presentan atención para regañarte, prohibirte cosas o decirte aquello que haces mal es probable que concluyas que esa es la forma en la que la gente debe de quererte y te sientas atraído por personas que te demuestren su “amor” a base de reproches. Al fin y al cabo es la única forma de amor que conoces.
• Porque puede que tu baja autoestima atraiga a un determinado tipo de persona que puedan en cierto modo aprovecharse de ella o que como consecuencia de ella te conformes con tan solo unas migajas de amor a cualquier precio ya que crees que no mereces algo más.
• Porque si papá pasaba la mayor parte del tiempo trabajando o de viaje y mamá pasaba los días quejándose por lo abandonada que se sentía, es probable que busques a alguien con las mismas características que papá con el fin de que cambie por ti y te demuestre lo mucho que te ama. (Siento decirte que lo más que probable es que nunca cambié)
• Porque si mamá tenía cada mes un novio diferente es probable que te cueste comprometerte en una relación o que busques personas con un bajo sentido del compromiso.
Porque al fin y al cabo aunque no nos parezca adecuado nuestra mente aprende de todas las experiencias que vivimos y en ocasiones concluye cosas que nos hacen actuar o comportarnos de una determinada manera sin ser consciente de ello.
Porque no te enamoras siempre de la persona equivocada si no que inconscientemente buscas a la persona equivocada para enamorarte de ella.
ENTONCES ¿CÓMO DEJAR DE REPETIR ESTOS PATRONES?
Tranquilo al igual que aprendiste estos patrones en su momento es posible revertir ese aprendizaje y aprender unos patrones de relación más saludables y que te lleven a unas relaciones de pareja satisfactorias.
¿CÓMO HACERLO?
1. Detectar esos patrones: El primer paso para cambiar algo es detectar que existe el problema y dónde está exactamente. ¿Por qué terminan la mayoría la tus relaciones? ¿Qué características en común han tenido casi todas tus parejas? ¿Tienen tus parejas cierto parecido con algunos de tus progenitores? Te recomiendo coger una libreta y realizar estos ejercicios por escrito. Escribir te ayudará ayudara a ordenar tus ideas y además podrás recurrir a ellas cuando quieras
2. Discriminar los indicios de que otra vez te está volviendo a pasar lo mismo: una vez detectes cual es el patrón tienes que estar pendiente de detectar los primeros indicios cuando empieces una nueva relación. Es normal que te sigas sintiendo atraído por personas con las mismas características que en el pasado, pero ahora depende de ti cortar a tiempo esa relación ya que sabes que ese tipo de personas te han proporcionado más sufrimiento que satisfacción y se trata de que no permitas que siga siendo así en un futuro.
3. Asumir tu parte de responsabilidad. Aunque estoy segura que no lo has hecho de manera deliberada, tengo que decirte que tú también tienes parte de responsabilidad en que las dinámicas de tus relaciones sean siempre parecidas. Un controlador necesita alguien que le permita ejercer ese control, una persona casada busca alguien que sea su amante, etc…Si la otra parte de la pareja no permite que se ejerza el control o pide un mayor compromiso en la relación tenemos frente a nosotros dos opciones: que la relación se rompa, o que la dinámica de la relación cambie. Te aseguro que merece la pena arriesgarse.
4. No trates de intentar cambiar a la otra persona. Créeme, intentar cambiar a alguien que no quiere cambiar es una guerra perdida. Vas a invertir un montón de energía en ello y lo más probable es que no obtengas ningún resultado. Está bien que le digas a tu pareja algunas cosas que te molestan y que te gustaría que modificara, pero siempre teniendo claro que cada uno es libre de cambiar o no. Y al igual que la otra persona es libre de decidir no cambiar determinadas cosas tu eres libre de decidir marcharte o aceptarlas.
5. No olvides la finalidad de las relaciones de pareja. La finalidad de una relación nunca puede ser encontrar a alguien que te complete, que te haga feliz o que compense tus carencias. Tu eres un ser completo y eres la única persona del planeta que debe cargar con la responsabilidad de tu felicidad. Si decides comenzar una relación recuerda que es para sumaros el uno al otro, respetar la independencia de cada uno de los miembros y acompañaros en vuestro proyecto de vida.
6. Cuida tu autoestima: Una autoestima saludable es el mejor tesoro que puedes tener. Para querer a alguien es un requisito indispensable que te quieras a ti mismo. Así que trabajar tu autoestima es la mejor garantía de que tus relaciones se vuelvan saludables y satisfactorias. En definitiva, si bien es cierto que a lo largo de nuestra vida de forma inconsciente aprendemos patrones que influyen en el curso de nuestras relaciones sentimentales, también es cierto que podemos hacernos conscientes de ellos y modificarlos con el fin de vivir unas relaciones amorosas más plenas, más conscientes y muchos más gratificantes.
http://elsindromedelamochila.com/amor-consciente/como-romper-patrones-en-relaciones/
