Hay una fuerza motriz más poderosa que el vapor, la electricidad y la energía atómica: la voluntad.
(Albert Einstein)
Perdonar y pedir perdón son dos cosas diferentes. Una sirve para sanar. La otra, puede perpetuar la enfermedad.
(Anónimo)
La repetición armónica de un sonido produce música, y la repetición armónica de un deseo produce milagros.
(Anónimo)
El azar es el seudónimo de Dios cuando no quiere firmar.
(Anónimo)
Todos los días Dios nos da una hoja en blanco para que escribamos en ella lo que queramos. La pregunta es: ¿Que vas a escribir tú en la hoja?
(Anónimo)
Cada criatura, al nacer, nos trae el mensaje de que Dios todavía no ha perdido la esperanza en los hombres.
(Anónimo)
Cuando doy lo que tengo, recibo lo que necesito.
(Tao)
La suerte es lo que sucede cuando la preparación se encuentra con la oportunidad.
(Séneca)
El mundo está en las manos de aquellos que tienen el coraje de soñar y correr el riesgo de vivir sus sueños.
(Anónimo)
Lo importante no es saber quiénes somos, sino sentirlo.
(Carlos González)
Mi corazón y mi lengua han hecho un trato: que mientras mi corazón esté enfurecido, mi lengua guardará silencio.
(Elfo Negro)
Amarse a uno mismo es el principio de una historia de amor para toda la eternidad.
(Eva Capilla)
El amigo verdadero no es aquel que te seca las lágrimas cuando lloras, sino el que hace todo lo posible para que no derrames ninguna.
(Anónimo)
Nacimos para ser felices, no para ser perfectos.
(Sandy González)
La oportunidad parece tener una extraña costumbre de favorecer a los que han pagado el precio de años de preparación.
(Anónimo)
La religión es un solo árbol con muchas ramas. Si no vemos más que las ramas, diremos que hay muchas religiones, pero si vemos todo el árbol, comprenderemos que hay una sola religión.
(Mahatma Gandhi)
Tu capacidad de servir a los demás está en proporción directa a la grandeza de tu corazón y a la nobleza de tus sentimientos; de igual manera, a medida que te esfuerzas por compartir, dar, servir y ser solidario: crece y se ennoblece tu ser interior, convirtiéndote en mejor persona, más feliz y con mayores posibilidades de vivir una vida de mejor calidad.
(Yayi Rivero)
La juventud es el momento de estudiar la sabiduría; la vejez, el de practicarla.
(Jean Jacques Rousseau)
Cada uno de nosotros está en la tierra para descubrir su propio camino, y jamás seremos felices si seguimos el de otro.
(Yayi Rivero)
El mayor beneficio que podamos hacerles a los demás no es mostrarles nuestras riquezas sino hacerles ver las suyas propias.
(Goethe)