ABUSOS SEXUALES | CÓMO HABLAR CON TU HIJO SOBRE EL TEMA SEGÚN LA EDAD QUE TENGA.
ROSSEL APARICIO
Consejos para ayudar a los padres a explicar a los niños y niñas los límites, la manera de reaccionar y a quién pedir ayuda
El dato es, sencillamente, escalofriante: Uno de cada cinco niños será víctima de violencia sexual, incluido el abuso sexual. Así de rotundo y preocupante. Y es más: les sucede a los niños y niñas de todas las edades, razas o clases sociales y religiones. Según los datos extraídos de la campaña europea 'Uno de cada cinco', el agresor además suele ser alguien de su entorno, alguien que el pequeño conoce y en el que confía. En ocasiones el autor -o autores, según el caso- puede ser otro menor o adolescente tal como denunciaron recientemente en Málaga (Ver noticia: Una pelea en un instituto destapa una supuesta violación a un menor discapacitado en Málaga)
El dato también debe servir a los padres para rebelarse y actuar ante esta terrible realidad a la que no debemos darle la espalda, todo lo contrario: debemos hablar con ellos para proporcionarles herramientas que les ayuden a protegerse de los depredadores sexuales o, sencillamente, de situaciones de índole sexual inapropiadas. No se trata de asustarles o de generarles desconfianza, no, pero sí de prevenirlos, de marcarles los límites. De la mano de la psicóloga infantil Elisa López, analizamos cómo podemos afrontar este delicado asunto en función de la edad de tu hijo.
ANTES DE LOS 3 AÑOS
Cuanto antes empieces a allanar el terreno, mejor. Quizás parezca que tu niño es demasiado pequeño para abordar esta cuestión pero lo cierto es que si el niño no tiene ninguna información o guía para actuar, estará indefenso si en el futuro fuera víctima o incluso testigo de un abuso sexual. «Puedes aprovechar la hora del baño o la de vestirse para trabajar el asunto. A los niños de esta edad hay que simplificarle mucho las ideas. Hablarles con un lenguaje claro, sin rodeos, sin extenderte. Con palabras sencillas», aconseja Elisa López. Te ofrecemos algunas pautas:
- Sus genitales, por su nombre real. Para empezar, ayúdalo a conocer su cuerpo llamando las cosas por su nombre, sin vergüenza de por medio ni eufemismos. Nuestros hijos deben conocer el nombre real de sus genitales y no sentirse con miedo a nombrarlos: háblales del pene y la vulva. Hazlo con naturalidad para que, en un futuro, no sea un tema tabú.
- Respeta sus límites. ¡No le obligues a dar besos! Ocurre que, a veces, se fuerza a los pequeños a dar besos a aquellos desconocidos (o conocidos) con los que el niño no se encuentra a gusto. No lo obligues, respeta sus límites. De hecho, si no le ves cómodo en brazos de alguien o no le gusta que otros familiares les pellizquen los mofletes hazle saber al pequeño que no es malo, que estás de su parte, y procura que no ocurra advirtiendo con tacto al adulto en cuestión.
- Solo mamá y papá. Aunque aún es pequeño puedes comenzar a inculcarle que sus zonas íntimas sólo pueden tocarlas papá y mamá (o él mismo, claro).
NIÑOS DE 3 A 6 AÑOS
Con niños en este tramo de edad también será necesario, obviamente, utilizar frases cortas, directas y adaptadas a su edad. Si te extiendes, el mensaje se perderá. «A esta edad no tenemos que explicarles que existen los abusos o los agresores sexuales pero sí podemos trabajar en lo que está permitido y en lo que no está permitido para que empiecen a entender que, en la ropa interior, hay un límite», advierte López. Debes avanzar en los siguientes aspectos:
- Define los límites: Su cuerpo es suyo. Una vez que los pequeños sepan reconocer adecuadamente los términos, -que llamen a sus genitales y partes de su cuerpo por su nombre real-, también hay que explicarles que son partes privadas o íntimas y que nadie debe tocar. Indícale que únicamente mamá y papá y él mismo pueden hacerlo y que, en ocasiones excepcionales, otras personas como abuelos o médicos también podrán hacerlo. Pero nadie más porque forma parte de su intimidad.
- Enséñale lo que es apropiado y lo que no lo es. Los niños no saben reconocer las formas apropiadas e inapropiadas de tocar. Debemos decir a los niños y niñas que no está bien que alguien mire o toque sus partes íntimas o incluso que les pidan que miren o toquen las partes sexuales de otra persona. En la ropa interior está el límite, es así de sencillo de trasmitir. «La comunicación abierta y directa a una edad temprana ayudará a los niños a comprender aquello que no está permitido», apunta la experta.
- Enséñale a decir NO. El niño debe saber que, si alguien traspasa ese límite, el de su ropa interior, debe decir NO de una manera tajante. Sencillamente enséñale a responder: «Eso no se puede tocar», o una frase similar. A juicio de López, aún será pronto para que el niño reaccione de esta forma pero es bueno comenzar a reforzar esa negativa en el niño.
- Secretos buenos y malos. Este aspecto también es interesante teniendo en cuenta que los agresores sexuales usan los secretos como vehículo con los niños para cometer los abusos en la mayoría de los casos. Por ello debes advertirle de la existencia de secretos 'buenos' y 'malos' creando con él un clima de confianza. De esta forma, si les confían un secreto que les incomode, que les preocupe o les entristezca que no dude nunca en contarlo a un adulto de confianza (mamá, papá, abuelo, tutor, etc). Enséñale que puede confiar en ti, siempre.
- Que desconfíe de extraños. Obviamente también debes hacerle entender a tu hijo que nunca deben irse con desconocidos, bajo ningún concepto. La idea no es generarle miedo pero sí advertirle que no todos los desconocidos son buenos.
- Mamá y papá: un refugio seguro. Este es otro aspecto que debe quedar muy claro: el niño debe saber que mamá y papá siempre estarán disponibles cuando se sienta confundido, inseguro o asustado. Hazle saber que cuente contigo siempre.
- ¿Y si usas un cuento para abrir fuego? Para abordar este delicado asunto te proponemos una útil herramienta: 'La Regla de Kiko' que viene acompañada de un cuento (se llama 'Kiko y la mano') para prevenir precisamente los contactos físicos inapropiados ( descárgatelo aquí). 'La regla de Kiko' forma parte de la campaña 'Uno de cada cinco' del Consejo de Europa y tiene como objetivo poner fin a la violencia sexual contra los niños. Se presenta como una guía útil para que padres, madres o educadores puedan prevenir a los niños. Este cuento infantil se ha convertido ya en todo un clásico y forma parte del material pedagógico para muchos jardines infantiles y escuelas públicas de Europa.
NIÑOS DE 6 A 12 AÑOS
Si aún no has hablado con tu hijo sobre el asunto empieza por las pautas -e incluso con el cuento 'Kiko y la mano'- recomendadas en el apartado anterior-. Con esta edad, aunque deberás adaptar la conversación con palabras que el menor entienda, podrás ahondar más en el asunto. Tampoco es cuestión de revelarles la existencia de las agresiones sexuales infantiles si no es necesario pero, dado el caso y si el niño -mejor que se acerque a los 10 años- lo requiere, sí puedes hablarle de esa terrible realidad sin necesidad de entrar en detalles. «En esta franja de edad debemos incidir en la prevención reforzando los límites antes descritos. Sin embargo, contarle a un niño esa realidad o no dependerá de la madurez del niño y de la necesidad real en cada caso. Si en el entorno se da algún caso de índole sexual, o en el cole juegan a ciertas cosas en el baño o si el niño pregunta, puede ser el momento de informarle teniendo en cuenta que aún es pequeño, claro», destaca la psicóloga, «podría ser suficiente con comunicarle que hay gente que quiere hacer tocamientos inapropiados con ellos y que eso no está bien», matiza. Pautas a seguir:
- Recalca: Su cuerpo es suyo. Debes recordarle que su cuerpo le pertenece a él o ella y que nadie debería verle sin ropa salvo sus padres o abuelos o personas de confianza. Hazle ver lo importante que es la intimidad en el baño y que debe respetar también la intimidad de los otros.
- Gente mala. Aprovechando el momento del baño y siempre sin alarmar a tu hijo puedes explicarle que, efectivamente, hay gente 'mala' a la que le gusta hacer cosas inapropiadas con los niños, y que esa gente mala puede estar incluso su entorno. No hace falta que le des más detalles que no necesita ni entenderá. Con 6 años quizás no sea necesario esta información pero con 9 quizás ya debas decírselo, dependerá del grado de madurez del niño en cuestión.
- ¡Usa un cuento!. Los libros son un recurso idóneo que les facilitará la expresión de sus emociones, la comprensión del mundo y el aprendizaje de habilidades y valores. Puedes usar el cuento 'Ojos verdes', un relato sobre prevención del abuso sexual, recomendado por la Confederación Española De Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos. (Descárgatelo aquí). Este libro de la psicóloga española Luisa Fernanda Yágüez, cuenta la historia sobre un niño y su vecino adulto, al que conoce y la relación secreta que mantienen.
A PARTIR DE 12 AÑOS
A partir de esta edad la conversación con nuestros hijos acerca del sexo y los abusos sexuales será más explícita. A esta edad entran en juego el uso de móviles, de redes sociales y, por tanto, quizás sea el momento de sentarnos a hablar de muchas cuestiones aunque el niño no te lo reclame. «Es una edad que supone un gran cambio en su vida. Los chicos se sienten mayores, pero no lo son. Aquí la prevención es vital porque están en un momento delicado en el que comienzan a tener interés por el otro sexo», indica la especialista. Es el momento de poner las cartas sobre la mesa y hablar claro. Cuestiones a tener en cuenta para la prevención:
- Control parental en Internet. Dependiendo del uso de las nuevas tecnologías en casa, será necesario enseñarles seguridad en Internet. Habrá que vigilar las páginas o vídeos que frecuentan así como instalar sistemas de control parental. Por otro lado, también es fundamental que los padres conozcan a la perfección los juegos o las aplicaciones que usan. A esa edad aún no son conscientes de los peligros del ciberacoso sexual (lo que se traduce en la persecución de una persona a otra, a través de mensajes, fotografías o vídeos de carácter sexual).
- Cuidado con el móvil y las redes sociales. Cuando nuestros hijos empiecen a hacer uso de su propio teléfono móvil, deben tener muy claras las normas básicas de seguridad. «Debes explícale cómo debe hacer la publicación de fotografías, del estado y de los peligros que tiene contactar con desconocidos. Debemos de estar al tanto y hablar con ellos sin tapujos de un uso correcto de las redes sociales e Internet», alerta López.
https://www.diariosur.es/sociedad/hablar-hijo-espinoso-20180215125050-nt.html?ref=https%3A%2F%2Fwww.google.com%2F