NO SEAS OTRO, SÉ TÚ MISMO.
En mi opinión, el descubrimiento de que no estamos a gusto con la persona que estamos siendo nos puede provocar el deseo de hacer un muy bien venido cambio personal. Ya he escrito sobre el Yo Idea y el Yo Ideal y al final del artículo aparecerá un enlace para quien quiera profundizar más en este tema.
A veces tomamos como modelo a una persona que nos gusta por algún motivo y tratamos de copiarla, de imitarla, de hacer lo que hace y como lo hace. Eso está muy bien cuando lo que se persigue es el mejoramiento y no la identificación. Identificarse es “hacer que dos o más cosas en realidad distintas aparezcan y se consideren una misma” y también es “llegar a tener las mismas creencias, propósitos, deseos, etc., que otra persona”. O sea, es convertirse en el otro. Y eso no es correcto. Cada uno ha de seguir siendo él mismo porque uno solo ha de aspirar a ser Uno Mismo.
Está bien tomar a otro como referencia, pero no hay que copiarle exactamente; es imprescindible personalizarlo de modo que uno lo integre dentro de sí con naturalidad y no tenga la sensación –o la realidad- de que está actuando, o que está ocupando el lugar de otro, o que está viviendo una vida que no es la suya. Es un error cambiar el modelo que uno está siendo por otro modelo, aunque sea mejor. Quien lo haga seguirá siendo otro modelo y no será Uno Mismo.
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No tenemos que heredar las verdades de los otros, salvo que estemos TOTALMENTE DE ACUERDO con ellas, pero tampoco hemos de heredar sus traumas, sus conceptos de bien/mal, bueno/pecado, placer/dolor, ni sus modos ni sus costumbres.
¿Para qué ser otro si puedes ser Tú Mismo? El paso imprescindible es estar de acuerdo con quien uno es, con las posibilidades que tiene, con su potencial y lo que puede llegar a ser, así que habrá que construir desde dentro, con los materiales naturales que componen a quien uno es. La referencia correcta es sentirse a gusto con uno mismo. Esa idea de que uno tiene que convertirse en un personaje para agradar a los otros es un error grave. Me encanta una frase que aclara bien esto: “Hay una cosa que ni siquiera el mismo Dios ha sido capaz de conseguir: gustarle a todo el mundo. No quieras conseguirlo tú porque es imposible”. No trates de crear personajes que agraden, de construir personajes personalizados para cada persona con la que te relacionas. Te perderás a ti mismo y ya nunca sabrás quién eres realmente. Siempre sé tú mismo, aunque no seas como los otros quieren siempre serás como quieres tú. (Me apetece copiar una frase que me hace gracia: “Sé tú mismo excepto si eres gilipollas, entonces es mejor que seas otro”). El humor siempre es bueno.
¿Cómo sé que estoy siendo yo mismo? Si a mi conciencia le parece que está bien, está bien. Si me encuentro cómodo, tranquilo, con una indefinible sensación de tranquilidad, está bien. Si mi intuición me sugiere que es correcto, está bien. No hay aparatos para medir si uno va bien o no. Solo la conformidad con uno mismo y el respeto a la propia conciencia nos indica el Camino adecuado. Uno solo tiene que dar explicaciones y rendir cuentas a sí mismo.
Ser realmente libre y ser realmente uno mismo es no necesitar la aprobación de los demás. No temer a las propias imperfecciones y aceptarlas –sin renunciar a modificarlas cuando se pueda- aporta una tranquilidad en la relación personal. Ser el peor adversario, ser un Juez implacable, ser excesivamente autoexigente o demasiado riguroso en la perfección, nos condena de algún modo a la insatisfacción y a que la relación con uno mismo no sea amable y cariñosa.
Escribió Octavio Paz que “Ser uno mismo es, siempre, llegar a ser ese otro que somos y que llevamos escondido en nuestro interior, más que nada como promesa o posibilidad de ser”. Mucha sabiduría en tan pocas palabras.
TÚ NO ERES EL YO IDEA NI EL YO IDEAL (en vídeo)
https://www.youtube.com/watch?v=xiSVtXc9e5ITÚ NO ERES EL YO IDEA NI EL YO IDEAL (en texto)
https://buscandome.es/index.php/topic,17043.msg19672.html#msg19672Te dejo con tus reflexiones…
