CAÓTICO ESPERPENTO.
Se me escapan los momentos
como los inviernos y las primaveras.
Espero con ansiedad y atención el siguiente…
que también me huye,
yo inconsciente,
por las rendijas que dejan mis desatenciones,
mis rutinas,
mis fugas de cada instante.
No soy yo,
es cierto,
pero sé que me debo a quien me habita
y no reniego de lo que sí soy aunque no debiera.
Por eso me lucho y recrimino,
me acuso de traicionero y distante,
de egocentrista y ausente.
Peleo a dos gritos (amor y odio)
a dos voces (conciencia y duda)
a dos penas (no ser y no intentarlo)
a dos fugas (de mí y de Mí)
Francisco de Sales