"Si esperáis siempre que piensen en vosotros, que os comprendan, que os ayuden, que os quieran, nunca seréis felices porque todo el mundo tiene sus preocupaciones, sus problemas. Tal vez alguien estará cerca de vosotros un momento, pero en el momento siguiente estará ocupado por alguna parte, y deberéis
espabilaros vosotros solos.
Es por ello que os digo: no contéis tanto sobre los demás, porque su atención, su amistad, su amor son cosas demasiado inciertas. En un momento, os sentís comprendidos, apoyados, pero en el momento siguiente, ¿qué pasará?
No debemos esperar nada de los demás, y sobre todo su amor.
Puede llegar, por supuesto, puede llegar incluso sin parar; si
llega, será bienvenido y vosotros lo agradeceréis al Cielo, pero no hay que esperarlo.
¿Queréis ser felices?
No pidáis ser amados, pero amad vosotros, día y noche y estaréis
constantemente en la felicidad. Tal vez un día os aparecerá un
amor formidable…
Sí… ¿por qué no?
Esto puede suceder, pero no lo esperéis. "
(Omraam Mikhaël Aïvanhov)