Qué difícil es sopesar todo lo que significa el tiempo.
Tiempo para hacer aquello que debes, tiempo para querer a aquellas personas que no le das lo suficiente por falta de él, tiempo para vivir dignamente sin reproches validos, tiempo para hacer de cada día algo bello y no oscuro.
¿Qué es el tiempo mas que lo que tú quieres que sea cuando sabes valorar todo lo que tienes y hay a tu alrededor?, ¿Qué es el tiempo que no sea correr y correr sin darte cuenta de que al no parar pierdes más que ganas?, ¿Qué es la vida más que el tiempo que estás disfrutando, dando sentido, abriendo puertas, saltando murallas y creando puentes para que las personas entren en tu vida?
Qué de cosas nos ponemos, que de impedimentos para no conseguir ese tiempo tan necesario para cultivar aquello que ansiamos que es la amistad, la tolerancia, el amor, la tenacidad de saber que podemos llegar si nos damos tiempo a nosotros mismos.
Qué de tiempo perdemos al pensar que no lo tenemos y cuando nos queremos dar cuenta ya se pasó, y no lo hemos vivido lo suficiente por estar metidos en nuestro mundo al que nadie puede entrar porque no hay espacio ni momento.
Cuánto nos cuesta dar ese tiempo para cosas que merecen la pena y cuánto damos a las cosas que no las merece como es el odio, la violencia, la intolerancia, la falta de respeto hacia los que nos rodean, a creernos que todo gira alrededor nuestro para nuestro bien y beneficio.
Qué de tiempo ganaríamos si diésemos siempre lo mejor de nosotros aun a riesgo de que nos tomasen por tontos; qué de tiempo ganaríamos si nos quisiéramos lo suficiente para poder dar sentido a lo que no lo tiene y así buscar soluciones en vez de quejarnos porque el vecino de enfrente no lo hace como debe; qué de tiempo ganaríamos en vivir si de verdad mirásemos con los ojos del corazón sin hacer comparaciones, sin querer que otros solucionen nuestros problemas; qué de tiempo ganaríamos si con cariño dijésemos lo que pensamos, no para destruir, si no para avanzar y conseguir ese cambio tan necesario, y qué poco a poco con tu aportación personal vas logrando en nuestro día a día.
Nunca hay prisas para amar, nunca para llegar a una verdadera amistad, nunca para la tolerancia, nunca para la no violencia, nunca para querernos lo suficiente.
Es muy bello cuando se saca un poquito de tiempo para decir un te quiero, para decir estoy vivo, que es lo mismo que decir estoy bien y me alegra que estés ahí; para mostrar tu luz y tu coraje ante las adversidades de la vida, es grande cuando eres capaz de olvidarte de ti para hacer algo bello por los que te rodean, es impresionante lo que ganas aunque no lo veas en el exterior pero si lo sientes dentro de ti.
El tiempo es lo que tú quieras que sea, es algo tan sumamente grande que a veces nos come el terreno, porque queremos ir deprisa a todas parte. El tiempo es algo para valorar pero le tienes que elegir tú, no él a ti para poder aportar algo grande a todo esto, el tiempo es muy poderoso si no le das sentido, si no valoras lo que te rodea, si no le muestras cara y le das un sentido, sino, al igual que viene se irá, y no seremos capaces de vivir dignamente y honestamente porque siempre iremos a contrarreloj.
Hoy es un día posible para hacer de nuestro tiempo algo maravilloso, aunque tengamos que superar adversidades, pero siempre habrá la oportunidad de empezar y hacer aquello que debemos, y hacerlo de tal manera que merezca la pena.
EstheR SO, sé feliz.
(Esther Sánchez Orantos)