Nunca se para de pensar, de estar, y de ser.
El tiempo sigue y sigue, y no para porque tu estés parada, pero poco a poco se va enredando y tienes que priorizar y dar sentido para poder hacer las cosas, y que todo vaya cogiendo ese rumbo que tanto te cuesta y que debe de estar ahí, pues gracias a él podrás elegir siempre el camino, podrás construir puentes, abrir puertas y sobre todo conseguir que todo vaya marchando despacio pero seguro.
Nunca se deja de evolucionar cuando observas, cuando tienes ganas de seguir el camino, cuando confías, cuando te dejas abrumar con los pequeños destellos que te da la vida, cuando no te dejas vencer por el primer desafío, cuando sabes que es duro pero no tanto como para no buscar opciones de salida, cuando haces y lo intentas, cuando respiras a pesar de las adversidades y no dejas de respirar para llamar la atención, cuando no buscas el que los demás te solucionen las cosas si no que te responsabilizas de tus actos y las consecuencias, cuando no impones la violencia por la violencia, si no que utilizas el diálogo, el respeto, la tolerancia , el amor, cuando distingues las cosas y sabes de lo que te tienes que ir separando y de lo que tienes que estar cerca porque siempre merecerá la pena.
Nunca es tarde para empezar o terminar, pues todo tiene un principio y un final, y en el medio está la lucha para equilibrar todo lo que nos acontece en el día a día, porque todo lleva a ese transito de la vida en el que tú te haces participe de lo que eres, dándole forma a un estado, a un movimiento, a un saber estar y a un salir a flote, que todo se gana o se pierde según como actúes, como pienses, como valores, como hagas para reforzarte cada día y aliarte contigo misma, para superarte en esas cosas tan difíciles como es ser una persona digna, coherente y llena de vida.
Nunca se deja atrás nada que no hayas vivido, que no hayas aprendido, que no te haya servido para rencontrarte y caminar, porque nunca dejas de ser tú, a no ser que te dejes arrastrar por la oscuridad de lo sencillo, de lo superficial, de los fanatismos absurdos, de los que no ven mas allá de sus narices y se creen el centro del mundo, pero si sabes quién eres, lo que eres, y te mueves queriéndote a ti, podrás hacerlo con lo que te rodea, pues de cómo tú estés depende tu alrededor, de cómo tú encamines puedes hacer que todo sea diferente, porque no consiste en ser una heroína, consiste en dar lo mejor, es ser capaces de escuchar, mirar, tolerar, amar, sin hacerse daño gratuito, dejando vivir y viviendo intensamente en donde estás y como estás, luchando por lo que crees, porque así sabrás que siempre hay un antes y un después, que siempre hay oscuridad pero también hay luz, que hay debilidad pero hay fortaleza, que hay cobardía pero también coraje suficiente, y sólo tienes que buscarlo dentro de ti, y te darás cuenta que todo eso es un conjunto que forma tu persona, tu manera de estar, pero que siempre te ayudará a sobresalir de las grandes rocas y montañas para encontrar esa vía, esa línea que te ayuda a crecer día a día un poquito.
Nunca dejamos de soñar porque tenemos alicientes, porque aunque nos sangre el corazón seguimos teniendo esperanza, fe, vida; sabemos que nos equivocamos, pero también sabemos pedir perdón, dar gracias, aportar a la vida algo bello, diferente; sabemos expresar un te quiero a tiempo y a destiempo, pero, sobre todo, sabemos que en nosotros existe eso que se llama corazón, alma, espíritu, libertad, responsabilidad, miedos, temores, y todo lo necesario para enfrentar, para vivir, para dar, recibir, conocer, y con ello poder crear eso que tanto nos disgusta, pero que vemos y necesitamos, que es un mundo sin rencores, sin odios, sin incultura, sin tantas cosas innecesarias; sabemos que no se hace en un día ni en dos, pero poco apoco vamos sembrando y dando nuestra pequeña forma de tal manera que se puede hacer de lo imposible algo posible.
Y hoy lo hacemos, hoy lo sentimos, hoy no negamos el nunca, hoy es hoy, estamos, somos, y formamos parte de ese mundo, y eso es algo grande y bello.
EstheR., sé feliz.
Esther Sánchez Orantos
