Hola...
Dice María Laura que "mi turno"... y no sé cómo salir de esta invitación.
Lo primero: En esta web, como se puede comprobar, se trata de evitar hablar de Dios. "Buscándome" quiere referirse a buscarse a sí mismo. Quizás Dios no tenga nada que ver en este asunto de buscarse, o quizás la búsqueda de uno mismo le lleva inevitablemente a Dios.
Se dice exactamente al inicio, pero refiriéndose a ese foro en concreto, no al conjunto de la web:
"LO SUPERIOR
Este no es el lugar de ninguna religión en concreto. Hay otras webs para ello. Este sitio es para los que creen que hay algo Superior, se llame como se llame".
Pero ahora mismo voy a cambiar "creen" -porque se puede asociar a "fe" o "creencia", con lo que ello condiciona-, y voy a poner "sienten" -que no necesita de explicaciones-, y cambiaré "lugar" por "foro".
Con eso lo que pretendo es evitar el divagar y discutir innecesariamente acerca de algo que tiene tantos conceptos distintos como personas.
Como la idea de la noción de Dios puede estar manipulada -aún sin mala intención- o puede estar condicionada -por el amor o el temor de Él-, o pueden entrar en juego los fanatismos, es por lo que quiero evitar desviar la atención de lo que puede ser más importante.
El ser humano "siente en alguna parte" que hay algo Superior, algo que está por encima de lo que se califica como "humano". O quizás es que lo necesita para justificar la finitud del cuerpo y creerse algo más que las hormigas. O quizás necesita a Dios como proveedor de milagros, alguien en quien confiar, la última esperanza o asidero, un buen amigo que conviene tener a mano, o el Padre que no ha tenido en su vida...
O, por el contrario, su sentimiento es sólido, su fe inquebrantable, su seguridad absoluta e indiscutible, o ha tenido un contacto con Él que se lo confirma, o quizás se dedica a Sentirle en vez de ponerse a teorizar sobre Él.
Por eso digo que hay tantos "Dios" como personas.
Tengo multitud de argumentos para poder convencer a quien sea de que existe algo "Superior" y la misma cantidad de argumentos para desmontarle las creencias a quien crea en Él.
Pero no haré ni una cosa ni la otra.
"Dios", en mi opinión, es un asunto del corazón, y no de la mente.
Quien Le busca con la mente quizás busca en el sitio equivocado y del modo inadecuado.
Quien no siente una necesidad de relacionarse con Él quizás no necesita ni perder su tiempo en Buscarle ni en Negarle. (Una amiga mía dice que no hay que buscar a Dios, sino dejarse encontrar por Él)
Por otra parte, si "Dios" está dentro de cada uno de nosotros, como se dice, cuando uno busca a "Dios" se está buscando a sí mismo. Y viceversa.
Quizás, sólo quizás, el conflicto parte de adjudicar mal los papeles:
Humano: finito, terrenal, material, inseguro, poca cosa...
Dios: intinito, celestial, inmaterial, seguro, gran cosa...
No sé cómo es realmente el humano en la teoría, pero en la vida cotidiana es la suma de sus proyectos y sus inseguridades, es amor y miedos, es dudas y buena voluntad, es todo corazón y un malvado reprimido, es el llanto y la sonrisa: es su realidad.
Yo creo, ahora, en esto que voy a escribir, pero si en algún momento creo en otra cosa, o lo veo de otro modo, cambiaré sin ningún pudor.
Creo que somos tanto el humano como el divino.
Creo que no hay que andar haciendo divisiones dentro de la unidad que somos.
Creo que hemos de tener la humildad de aceptar que somos parte de la Divinidad -aunque no seamos inmortales y seamos incapaces de crear el Universo- y también estamos siendo parte de un cuerpo que algún día fallecerá.
El ser humano, y esto es indiscutible, es capaz de las mayores proezas de generosidad y amor, y es capaz de las mayores crueldades.
Las cosas de las que más seguros estamos pueden llegar a ser simplemente errores o fanatismos.
Las dudas pueden ser el miedo a aceptar la verdad que intuimos.
Hay asuntos que son del corazón y pretendemos resolverlos con la mente, y viceversa.
Hay cosas, como la fe, que no requieren razonamiento ni explicación.
Creo que no hemos de Buscarle mirando al cielo, ni tener una idea predeterminada de qué es lo que espera, ni adjudicarle cualidades, ni negarle.
Cada uno determinará la atención que va a dedicarle.
Si a uno "le preocupa" es porque le importa, porque si no le importara no le preocuparía. Como no le preocupan los resultados de la liga de baloncesto escolar en Australia.
Insisto en que hay grandes posibilidades de error en buscar a un Dios que quizás no existe, o en Adjudicarle unas cualidades que sólo se alimentan de fantasía o errores, o en llegar al fanatismo por Él, o en hablar de Él sin Haberle experimentado, o en ser simplemente un teórico que sólo usa su mente para Negarle y no se ha escapado de ella para Verle con los ojos del corazón, o en cosificar algo que es solamente una sensación...
Quizás debiéramos llevar esta conversación sin palabras, que pueden llegar a desvirtuarlo todo, y a enfrentarnos innecesariamente creando dos bandos.
Al que cree le bastan con sus sensaciones.
Al que razona no le llegará con todos los razonamientos del mundo.
Al releerlo me parece un poco caótico, pero así es como ha brotado.
Cedo mi turno...