5 frases del Dalai Lama para pensar
“Recuerda que no obtener lo que uno quiere, a veces, es un golpe de suerte maravilloso.”
Dalai Lama
Socialmente, nos enseñan a percibir la felicidad como algo difícil de conseguir y que cuando logramos sentirla, constituye un tiempo demasiado limitado. Debido a esta forma que nos han inculcado de entender la vida y nuestra felicidad, actuamos impasibles esperando a que nos llegue ella misma ya que creemos que no podemos conseguirla directamente.
Uno de los puntos más complicados dentro de este aprendizaje de “cómo ser felices” es que no nos enseñan a reconocer la felicidad y valorarla como tal, empezando y continuando así un bucle en el que siempre nos encontraremos frustrados, sin tocar nuestra plenitud interior y existencial.
Gracias a la Psicología Positiva y filosofías ancestrales tales como el budismo, podemos percibir la felicidad como cercana, muy posible en nuestras vidas y su sensación necesaria en la vida de los seres humanos.
Para alcanzar un mayor desarrollo y crecimiento personal hoy tomaremos una de las filosofías más cercanas al sentir de la plenitud y paz interior, los 5 pensamientos del Dalai Lama:
- El propósito fundamental de nuestra vida es buscar y alcanzar la felicidad. Estaréis de acuerdo con nosotros en que las personas suelen considerar más primordial aumentar su patrimonio material que su matrimonio espiritual. Parece que el primero es el urgente, el que corre prisa y que el otro tiene que ver con ratos de ocio postergables y prescindibles, al final, la mayoría de las veces.
Si nuestra vida la basamos en esa forma de sentir y entender el mundo, es fácil que solo pretendamos “amasar” riquezas buscando una seguridad material que nunca va a ser una seguridad real. Siempre podemos imaginarnos alguna situación hipotética más, para la que igual podemos necesitar más dinero.
Aun así, leer esta frase nos proporciona una apertura de mente en la que es posible entender nuestra existencia y metas de una forma completamente distinta a la que hemos llevado, o nos “han hecho llevar” hasta ahora.
- Si deseas la felicidad de los que te rodean y tu propia felicidad, practica la compasión. Una de las reglas más complicadas de aplicar en la vida de una persona, constituyendo uno de los pilares básicos para disfrutar de nosotros mismos y los de nuestro alrededor es la compasión. Ser una persona compasiva significa hacer todo lo posible para aliviar el sufrimiento de los demás y, por extensión, el propio.
La compasión se construye gracias a la comprensión, la aceptación y el cambio. Gracias a esta reflexión podemos entender que, si desarrollamos una actitud compasiva hacia los demás y nosotros mismos, podremos alcanzar la felicidad.
- Cuando sufrimos una tragedia podemos seguir dos caminos: perder la esperanza y llevar a cabo hábitos autodestructivos o usar el desafío para encontrar nuestra fuerza interior. Solemos encontrarnos con personas que tienen tendencia al lamento propio de estar llevando una vida llena de fracasos, continuos pesares o ningunas oportunidades.
De esta forma no perciben que están continuamente atándose a su pasado, empleándolo como excusa para detener y no avanzar en su “ahora” presente y futuro. Evidentemente, cada persona tiene una experiencia vital distinta al resto pero, si nos atamos al pasado y pasamos nuestros días pensando en lo que hicimos o podríamos haber realizado, no podremos ser conscientes del aquí y ahora
Un presente tan necesario para seguir mejorando en todos los aspectos, crecer y por consiguiente alcanzar la felicidad.
- Si tu mente está calmada y en equilibrio, tu capacidad para disfrutar de una vida feliz será mayor. Cuando somos capaces de dominar nuestra mente podemos ser capaces de ser felices.
¿Por qué? Todos los pensamientos y miedos que nos impiden llevar a cabo actos que nos permiten “tocar” y vivir la felicidad tienen origen en nuestra mente. Si conseguimos mantener nuestra mente calmada podremos invertir nuestras energías, sin barreras, en encontrar la mejor solución y saber gestionar nuestros propios conflictos internos y superarlos de forma sana y equilibrada.
Si vivimos con una mente que no podemos o sabemos controlar, estaremos generando problemas y obstáculos que no existen, los cuales nos dificultan alcanzar la felicidad.
- La mayoría de nuestros problemas tienen su origen en el apego a cosas que de forma errónea creemos permanentes. El desapego es uno de los principios más básicos e importantes del budismo. Es cierto que muchos de nuestros sufrimientos tienen origen en el apego que tenemos a ciertas cosas materiales, situaciones o personas.
Generan en nosotros internamente un vínculo el cual creemos que si perdemos, sufriremos y no nos sentiremos bien. Para el budismo el desapego significa no sentir esa necesidad generada por un vinculo emocional, siendo conscientes de que nuestra felicidad no depende del cariño de otras personas o de cuantas cosas tengamos en nuestro poder.
Dejar fluir es una de las herramientas más plenas que puedes empezar a practicar si en algún momento sientes que te cuesta “dejar ir” ciertas situaciones.