CÓMO EXPLICAR LA DEPRESIÓN A QUIEN NO LA SUFRE
Por Maite Nicuesa
Cada vez tenemos más información sobre la depresión y todos los estados afectivos que la rodean. Sin embargo, lo que ocurre con este tipo de enfermedades mentales, es que sus síntomas no son tan visibles como cuando una persona tiene una lesión física, por ejemplo. Y sin embargo, cuando una persona tiene depresión, siente que en su interior es frágil, vulnerable y en muchos momentos, incapaz.
Es decir, en cierto modo, siente el peso de una lesión anímica como si necesitase muletas para caminar, avanzar y seguir adelante. Un enfermo de depresión realiza esfuerzos estóicos para tareas tan rutinarias como empezar el día por la mañana. De hecho, el enfermo de depresión sufre ansiedad, especialmente, a primera hora de la mañana cuando siente el peso de un nuevo día que se visualiza con inquietud. Un enfermo de depresión no siente que "querer es poder". De hecho, esta idea le hace sufrir todavía más. Siente que su estado de ánimo desborda su propia voluntad.
Por suerte, cada vez hay más conciencia de esta afección pero, a veces, no resulta fácil de entender para quienes nunca la han tenido.
CÓMO EXPLICAR QUÉ ES LA DEPRESIÓN
La depresión es uno de los trastornos mentales más extendidos en las sociedades occidentales a día de hoy, sin embargo, resulta bastante complicado entender cómo se siente alguien deprimido/a si no compartimos esos síntomas. Para saber cómo explicar la depresión a alguien que no la sufre, podemos hacer un ejercicio de empatía y entender los sentimientos que puede estar sufriendo la persona con esta dolencia mental.
Los orígenes de la depresión son múltiples, no obstante, todos ellos desembocan en un profundo sentimiento de desesperanza, indefensión ante la vida y, en muchas ocasiones, tremenda frustración. Las personas deprimidas no ven luz más allá del túnel, son incapaces de encontrar soluciones a los problemas más cotidianos pero no debemos culparlas por ello. Una persona deprimida nota que no está haciendo las cosas bien, que hay algo que no funciona dentro de ella y siente que eso puede afectar a su entorno. La clave para ayudar a alguien con depresión es comprenderla y acompañarla en su tratamiento.
En el ámbito laboral, la depresión también puede manifestarse cuando el profesional siente que los acontecimientos cotidianos de la oficina desencadenan una reacción interior de malestar, tensión y ansiedad generalizada. Imagina cómo sería la vida si sintiésemos que durante el día a día tenemos que ir dando saltos para salvar obstáculos constantemente. Esta es una de las sensaciones que tiene un enfermo de depresión, este realiza sobreesfuerzos para tareas simples que, en principio, no requieren tanta concentración.
La depresión viene acompañada de una especie de tedio, melancolía y nostalgia. Es como una especie de hilo interior que tira del corazón creando un arraigo en la añoranza. Sin embargo, conviene puntualizar que la depresión no solo puede mostrarse a través de la tristeza sino también, mediante la ira. Sin embargo, el enfermo tiene un doble sufrimiento ya que además de la ira, también se siente culpable en muchos momentos por sus reacciones con amigos y familiares.
Un enfermo de depresión siente que la angustia que siente le produce una especie de nudo en el estómago que afecta incluso a su apetito. El enfermo sigue siendo la misma persona, y sin embargo, no se siente igual que siempre. Tiene miedo a los cambios. El enfermo visualiza el cambio desde una perspectiva amenazante ante la que quiere protegerse.
CARACTERÍSTICAS DE GENTE CON DEPRESIÓN
EL PENSAMIENTO NEGATIVO
En muchas ocasiones, el enfermo se hace muchas preguntas sobre el sentido de la vida o el sufrimiento. La verdadera lucha de un enfermo de depresión no reside tanto en el exterior como en su propio mundo interior (sobretodo si se trata de una depresión endógena). No resulta fácil para alguien con depresión parar la cadena de pensamientos negativos que puede llegar a acumular a lo largo del día. Cada pensamiento negativo es como una descarga eléctrica de desánimo.
Para el enfermo que se encuentra en una fase avanzada de depresión, la vida es como una película en la que predominan los tonos grises sobre los colores vivos, las emociones desagradables son más frecuentes que los sentimientos vitales.
SIN GANAS DE HACER NADA
Una persona con depresión no siente motivación para seguir adelante con los proyectos o los retos que nos propone la vida, este sentimiento de denomina abúlia y es uno de los síntomas más característicos de la depresión.
La abúlia se define como la debilitación de la fuerza de voluntad, disminución de la motivación y pérdida de objetivos. Equivale a levantarse por las mañanas sin ganas de hacer nada, sin felicidad ni alegría por empezar un nuevo día. Es posible que, en algunas ocasiones, nos levantemos con dicho sentimiento, no obstante, una persona con depresión lo sufre casi cada día y no resulta una emoción nada agradable.
NO DISFRUTAS DE LA VIDA
Otro de los síntomas que más predomina en las personas con depresión es la anhedonia. Este sentimiento implica el hecho de no disfrutar de nada en la vida, la incapacidad de sentir placer por cosas con las que anteriormente una persona disfrutaba. A un individuo con anhedonia ya no le resultan tan atractivas muchas de las actividades que antes le encantaban, se siente incómodo/a con los planes sociales de grupo y tampoco disfruta con los encuentros casuales con algunas personas.
Es importante comentar que cada tipo de depresión es distinta. Cada caso, en cada persona, también lo es. Por esta razón, lo más importante es que cada paciente, a nivel individual, confíe en un profesional especializado, ya que gracias a un tratamiento personalizado, las posibilidades de curación ante un caso de depresión son muy altas. Y es ahí donde nace la esperanza.
TENGO DEPRESIÓN Y MI PAREJA NO ME ENTIENDE
Es posible que seamos nosotros/as quienes suframos de depresión y queramos herramientas para que la gente de nuestro entorno entienda qué nos está ocurriendo. Puede ser que nos sintamos incomprendidos/as y creamos que nuestra pareja no nos ayuda o no entiende qué está pasando por nuestra cabeza. Si estamos en esta situación, lo primero que hay que hacer es comprender que esta enfermedad es difícil de entender por aquellos que no la sufren. Es importante comunicar cómo nos sentimos de la mejor manera posible, intentando trabajar la comunicación basada en la asertividad empática.
La depresión y las relaciones de pareja son dos cosas difíciles de combinar, es por ello que debemos trabajar en equipo para salir de esta situación sin dañar la dinámica con aquella persona con la que estamos. Es probable que encontremos la motivación necesaria para acudir a un experto y empezar a tratar esta dolencia tan limitante en nuestras vidas. Sin embargo, si nuestra pareja tiene demasiadas dificultades para entender lo que ocurre, tendremos que intentar desarrollar estrategias independientemente de si vamos a tener su apoyo o no.
Este tipo de dolencias afectivas no tienen un tratamiento o una cura fácil, sin embargo, el primer paso es detectar la necesidad de acudir a un profesional y encontrar las herramientas necesarias para dar pequeños pasos al frente.
Este artículo es meramente informativo, en Psicología-Online no tenemos facultad para hacer un diagnóstico ni recomendar un tratamiento. Te invitamos a acudir a un psicólogo para que trate tu caso en particular.
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