No estás Deprimido, estás Distraído...
de la paz, por eso te pregunto cuando vas a dejar de pelear para comenzar a vivir, porque no se pueden hacer las dos cosas a la vez.
Me preguntas cuando volverá Jesús, y te digo que nunca se fue, que siempre estuvo en tu corazón, solo tienes que callar a la cabeza y escucharlo; nadie se hace la gran pregunta, ¿qué soy? Todos siguen cumpliendo un papel, generalmente decidido por los demás, como el éxito y el fracaso, todos son lo que se ve sus cuerpos o sus logros materiales y las cosas materiales son tan importantes que los amores que comienzan en los parques, terminan en los tribunales.
Todos ejercen la mendicidad de alguna manera, olvidando o no enterándose jamás que son príncipes, parte de un universo extraordinario al que olvidan por pequeñeces locales, parroquiales, a veces solo familiares.
Reconozco muchas caras y conozco algunos nombres, pero pocos individuos que sepan quienes son.
Me preguntas dónde puedes encontrarme y te digo en cualquier parte porque soy parte del universo.
El nombre y el oficio son distracciones, cárceles, limitaciones; un camino que nos marcan y que seguimos ciegamente tan ocupados que jamás nos detenemos a pensar quienes somos, y el espíritu que es lo que somos, no acepta condiciones.
Por eso no hay que confundir lo material con la realidad, por lo tanto no hay fronteras, aunque la mayoría las necesite por miedo al infinito; por eso inventó instituciones como el matrimonio, el nacionalismo, los ideales, la patria, estacas a las que se ata para no tener que vivir la totalidad.
La casa de uno es uno, por eso yo estoy bien en todas partes, y a mi casa entran y de mi casa salen pensamientos y sucesos constantemente.
Y si mi casa soy yo que soy parte de todo, mi casa es este mar y esa playa, esos delfines y este hotel, esta silla y aquel velero que deja una estela blanca sobre el turquesa que inventa la luz, que también es mi casa como las sombras de los laberintos que pueblan las mentes de los locos, que también son mi casa.
Como la música de Mahler, la pintura de Cézanne, los cigarros de Chez Davidoff y el rock and roll.
No puedes mover a tu cuerpo porque está demasiado cargado de pasado, olvida hasta tu nombre y comienza de nuevo en este momento e inmediatamente sentirás que vives en un mundo maravilloso.
Cuando sientes que no eres lo que piensas, puedes volar, el principio y el final, es decir la vida y la muerte son invenciones de la mente como sufres cuando se va tu hijo porque te acostumbraste a pensar que eras solo padre.
Deja el pasado de lado y sentirás toda la vida, solo las moléculas se disuelven; la conciencia no muere con la materia, la luz de la conciencia seguirá iluminando los infinitos caminos de la vida.
No somos tan malos como creemos, por eso la paz es posible y la paz es el punto más alto que podemos alcanzar, parece que Dios nos ama más que nosotros mismos porque sigue dándonos oportunidades todos los días.
Francisco tenía razón, el sol y la luna son hermanos, los animales y las plantas son nuestros hermanos porque todos somos criaturas del señor; entonces nuestras obras son nuestras hermanas y hermanas del sol, la luna, los animales y las plantas.
Y si digo nuestras obras digo la pintura, la música, la literatura, los automóviles, los aviones, los teléfonos, las computadoras.
No busques afuera, lo que no tienes adentro.
No puedes pedir amor, si no lo diste.
No puedes pedir justicia, si no fuiste justo.
No puedes buscar paz afuera, si no la tienes dentro.
Pero no hay apuro, tienes a la eternidad delante, además el trayecto suele ser más emocionante que la llegada, si es que se puede llegar a alguna parte; entonces lo sensato es recomenzar a cada instante.
Sin impaciencia, desaparecerá la violencia, la vida le gana a la muerte, por eso nace mas gente de la que muere y nacen mas en los países pobres que en los países ricos, ocupados en fabricar armas para matar a la mayor cantidad de gente posible, tarea grosera e inútil porque la vida vence a la muerte.
Que al fin y al cabo es una manera de recrear, por eso el arte que es una fiesta sigue inventándole fábulas a la vida para llenar de esperanza a la gente y esto en un lenguaje que nos llega a todos, la belleza.
La paz, hace nacer pueblos y enriquece a todos, pueblos que se comunican entre sí gracias al arte que no tiene fronteras; pueblos que no dejan de elevarse como Manhathan, pueblos que flotan graciosamente como Amsterdam, pueblos de rincones luminosos como París al que Cortázar pudo ver desde Buenos Aires y Henry Miller desde New York.
Pueblos como Sevilla, apoyados en el canto, pueblos como Copenhague de plazas congeladas para que vuelvas a los hogares donde los leños ardiendo son la mejor compañía de Ravel, pueblos como Zurich de cajas fuertes rodeadas de lagos y cisnes, fue una tragedia para Salvador Dalí la muerte del suyo.
En la paz, todo es creación, es un vivir en arte, la paz me sonríe, me envuelve con su aire fresco; la paz me hace gozar como nadie al sol de todos.
Por la paz, mi canto se eleva muy alto y agiorna los rincones más bajos, la paz es el poema que mejor me modela, en la paz mis hermanos trabajan la tierra y mis hermanas tienen hijos; en la paz se siente cómoda la libertad y es fácil la justicia.
La paz es una flor donde están todas las primaveras, en la paz nos miramos a los ojos y compartimos todos nuestros sueños por audaces que sean.
En la paz, uno es uno mismo, sin esfuerzos, en la paz todo me da derecho a sentirme hijo de Dios.
No seas desagradecido, piensa cuantas cosas tuvieron que conectarse desde lo más recóndito del universo para que fueras este que eres, para que pudiera ser la ciudad donde vives.
Piensa cuantos millones de años tuvieron que pasar para que tuviéramos conciencia de la maravillosa inmensidad que nos rodea, de la que somos parte.
Yo soy nosotros, dice Marcos Constante que tiene una visión traspersonal, es decir que ya está en la nueva era.
Abre los ojos de tu corazón y lo verás a Dios que es lo que nos habita cuando estamos conscientes, entonces sentirás que el espíritu se recreó hasta llegar al hombre que llega a tener conciencia de Dios; el hombre en el que se repite toda la evolución.
Somos el final de una cadena extraordinaria que tiene quince mil millones de años, tal vez seamos el objetivo de la creación, entonces nuestra religión es universal.
Arriesga, la vida es cambio permanente, por eso siempre te da revancha, recuerda que el que no está dispuesto a perderlo todo, no está preparado para ganar nada.
Ahora que estás solo y tranquilo, ahora que estás contigo mismo, único ser del que eres responsable te diré: Deja que la curiosidad te lleve donde sucede la vida, no seas espectador de la televisión sino protagonista de la tierra; recuerda que a los que se animaron les debemos todo.
Píntate un sí en la frente antes de salir a la calle para que se te acerquen los que quieren vivir, sin preocuparte por el tiempo porque en una eternidad se recomienza a cada instante.
Y no pierdas energía cuidándote, porque la vida es bello peligro, si mi madre se hubiera cuidado de mi padre, yo no estaría aquí.
Si nos juntamos, somos ricos; tu tienes lo que yo no tengo y viceversa.
Y que sucedería si nos juntamos todos desde el cada uno que hay en el cada cual, la vida nos propone tantas cosas permanentemente que hay que hacer mas esfuerzo para seguir siendo pobre y desdichado que rico y feliz.
No olvides que eres un aristócrata, un príncipe porque eres hijo del rey del universo, solo tienes que darte cuenta; recuerda que Jesús decía que al pan lo trae la verdad y a todo lo que necesitas.
Entonces no hay límites, tú decides a donde quieres llegar, y esto con la alegría que abre todas las puertas porque para Dios, siempre somos niños.
Entonces la vida es un juego maravilloso, un juego que incluye al todo y a todos, estás hecho a semejanza de Dios, entonces puedes recrear todo.
Cuando dices no puedo, estás diciendo no quiero.
Ya hay demasiados mártires, necesitamos héroes; levántate y anda, yo te acompaño como te acompañarán todos los que se animarán a vivir mejor, los que terminan favoreciendo a toda la humanidad que es la grandiosa empresa a la que pertenecemos todos.
Camina tranquilo, que no te confundan los noticieros, el bien es mayoría, que no te distraigan de tu tarea que es alcanzar la plenitud.
Nada como vivir en uno mismo, solo así puedes sentirte en casa en cualquier parte, entonces nada es lejos ni ajeno.
Si cada uno fuera cada cual, la sociedad sería una orquesta enriquecida por todos los sonidos, por todas las voces, una grandiosa armonía de individuos; la sinfonía donde todos aportan su voz, una partitura escrita para cada uno de los instrumentos es decir una partitura respetada por todos.
Pero esa orquesta que deberíamos ser está fragmentada porque todos estamos contra todos, y esto nos ha agotado y desesperanzado por eso perdimos la imaginación que podría darnos alguna idea de convivencia.
Pero el miedo que es ignorancia nos separa más y más y este divorcio nos enferma y empobrece a todos porque la humanidad es un repertorio riquísimo, tan brillante como interminable.
Y todos tenemos que ver, porque todos venimos de un primer hombre, de una primera mujer.
Entonces, hay negros y chinos en mí, soy tan bueno como Jesús y tan peligroso como Hitler, soy tan Musulmán como ateo.
Muero con el que muere y nazco con el que nace, todos somos fecundados y auxiliados por todos pero desestimamos a todos porque nos desestimamos; en lugar de enriquecernos con el otro, le escapamos, nos combatimos en lugar de asociarnos.
Y matar al otro es suicida porque es una continuación nuestra, el odio que es miedo, nos ha traído a esta desesperanza que es donde se ahoga la imaginación y sin imaginación perdemos la bendita semejanza, es decir, dejamos de ser creadores.
La tarea es armonizar esta gigantesca variedad que es la humanidad porque esto enriquecería a todos.
Hasta dejamos de decir cosas bellas a las mujeres porque ahora puede ser considerado acoso sexual, pronto tendremos que salir a la calle con un abogado; parecería que vivir es una secuencia de pleitos.
La tarea es comprender que la vida son subidas y bajadas, constante movimiento, es decir cambios.
Entonces tenemos que sacar de nuestro lenguaje la palabra decadencia que es una etapa más.
Nada es para siempre.
Por eso debemos estar atentos, listos parar el cambio, preparados para toda circunstancia porque la vida es como es, no como debería ser.
Todo nos fue dado, por lo tanto nada nos pertenece.
Solo nos queda gozar lo creado y cuidarlo para el que vendrá, que es una continuación nuestra como nosotros somos continuadores de nuestros padres, de nuestros abuelos, de nuestros bisabuelos y así hasta Adán, el rojo Adán, como le gustaba decir a Borges; que cometió el peor de los pecados, no fue feliz.
Por eso se sentía perseguido por la sombra de haber sido un desdichado.
El primer dato de sabiduría es saber quien es el que sabe, el segundo estar en lo amado, que nos hace más brillantes porque estamos más atentos, por eso rendimos más.
El amor nos agiorna dé tal manera que enamoramos a todos.
Está permitido que te caigas, pero no que te quedes en el suelo.
En este momento la sociedad está detenida por una congestión del tránsito, que ya es desmesurado porque las ciudades ya son desmesuradas.
O tal vez dejamos de pensar para cambiar todas las ideas y comenzar de nuevo.
Ya no habrá grandes mitos que seguir, ideologías, ahora deberemos comunicarnos de hombre a hombre porque esta es la era del individuo, por eso la Internet, entonces aumentará la calidad, desaparecerá lo macro para que señoree lo micro.
Esto quiere decir que de aquí en más no habrá televisor, política o familia que pueda apagar ese fuego sagrado que es el alma donde vive para siempre la inteligencia alimentada por el universo desde hace tantos siglos.
Los que preguntan. Avanzan, los que no preguntan se quedan; es decir mueren porque la vida es movimiento, todo se recrea a cada instante por eso hay que estar atento
Por una mujer te pierdes al resto, por una casa te pierdes el mundo; es decir por una esquina te pierdes mares y río, es decir delfines, ballenas, salmones, tiburones.
Por una familia, una ideología y una religión, te pierdes arquitectos, egiptólogos, poetas, filósofos, chamanes, antropólogos, profetas, miles de maneras de ver al espíritu y las estrella.
Orquídeas de Colombia, Bacón, Giacometti, Nietzsche, el golfo de Akaba, Alejandría, Tokio, la Grecia de Homero que tanto amó Lorenz Darrell, Guanajuato donde me enamoré de Catherine Valetzka aunque no tuve oportunidad de decírselo.
Chichicastenalgo donde con una danza ordenaron a mi esqueleto, París donde Rilke veía despertar a la belleza cada mañana al lado de Roddanne, el Tratévere Romano donde Fellini dibujaba sus personajes, donde el Moisés de Michellángelo está harto de los turistas que lo asfixian en San Pietrenvincoli donde apenas cabe.
Londres, Berlín, Bruselas, Praga donde los escritores románticos tenían una idea tan alta de la felicidad que nunca la alcanzaban, por eso se sentían desdichados, tristeza que los excitaba, dolor que gozaban como los cantaores flamencos y los cantores de tango.
Madrid, donde Lupe siempre está al borde del pensamiento pero nunca cae, Miami que es el puente que comunica a los latinos con los sajones, el desierto de Sonora donde conocí a Eric Fromm que decía que Suzucki era un budista Zen porque lo había experimentado y esa autenticidad lo hacia difícil de leer porque el Zen no da respuestas racionalmente satisfactorias pero si los libros de los intelectuales occidentales que lo explican mas fácilmente aunque no lo hayan experimentado.
No idolatres a nada ni a nadie, porque tener una idolatría es perder la independencia, y esto es conflicto, enfermedad segura.
Como fácil se pierde lo que se ganó sin esfuerzo, como sigue siendo pobre el que no goza lo que le sobra.
El gran paso es ir de la egolatría que te compromete, que te esclaviza a tantas cosas externas a la libertad interior.
Entonces se alcanza la paz y la paz te hace vivir todo con plenitud, es decir, enriquece.
Los últimos salvadores son dudosos, pero no afectan la enseñanza de Buda ni enferman a la Biblia, la enseñanza de Buda no está debilitada por el que no cree en la trasmigración, ni muere la Biblia porque se enfrente al saber mas realista de la historia de la tierra y de la evolución del hombre.
Como es inocente pensar en una sociedad sin delincuentes, pero cualquiera puede ser mejor si se lo propone.
No le bastan las buenas intenciones al universo, que es como es, no como nos gustaría que fuera.
La verdadera fe comienza trabajando en uno mismo para creer en uno mismo, y cuando uno está bien plantado en uno mismo se anima a ver todo, entonces conocemos a la realidad y de ahí en mas podemos comprenderla.
Entonces nos salvamos de las decepciones; sabemos que detrás de una máscara siempre hay otra como también vemos la pureza en la desnudez, las libertades del jazz y los rictus de las dictaduras.
Aceptar la realidad es salvarse de los engaños, entonces la verdad nos hace vivir plenamente.
No te engañes, entonces nadie te engañará.
Sé firme como Buda, como Jesús, como Espinoza, como Einstein, como Ford, firme pero abierto al mundo atento a las propuestas de la vida
Predica las virtudes pero no calles las verdades.
Nunca te arrepentirás de haberte animado, y nunca te perdonarás no haberlo hecho, además no tienes nada que perder porque ni una sola de tus orejas es obra tuya; Y no te preocupes por el futuro porque al final de tu vida no te espera la cima de la montaña sino la paz del valle.
A nadie tienes que rendir cuenta si no haces mal a nadie, como nadie tiene que explicar nada; por eso no debes agotarte en las vanas tareas de querer convencer y gustar, lo importante es que estés convencido y te guste lo que haces, y si tienes un gran sueño debes estar dispuesto a un gran esfuerzo para concretarlo porque solo lo grande alcanza lo grande.
Si estudias superficialmente aprenderás superficialmente, si vives por la mitad sólo conocerás la mitad de la vida.
Si tienes la cabeza dividida verás al mundo dividido, si trabajas por obligación serás un desocupado, un desdichado mas, si tienes miedo no conocerás al amor que es valentía.
No estás Deprimido, estás Distraído...
Del presente donde sucede la vida, por ejemplo, los amaneceres y los ocasos, las gaviotas, los cóndores, las águilas, las palomas y las golondrinas.
Las montañas, los valles, los ríos y los mares; el deporte, el arte, la agricultura, la arquitectura, las selvas, los guacamayos, los monos, los tigres, los leones, los cocodrilos, los elefantes, los arroyos; los seres humanos de todos los colores.
El ilusorio tiempo que te empuja y la eternidad que te permite cambiar de rumbo y recomenzar a cada instante.
No estás Deprimido, estás Distraído...
De las maravillas que suceden alrededor de ti, desde nacimientos a cosechas, desde revoluciones a conciertos, desde campeonatos de fútbol a viajes interplanetarios.
No estás deprimido por algo que pasó, sino distraído del todo que es ahora mismo.
Vengo a recordarte que todos somos parte de la empresa más grandiosa, la humanidad, que construye, que cura, que siembra, que lava, que canta y que baila.
Dios espera que el hombre vuelva a ser un niño, para recibirlo en su seno...
No estás Deprimido, estás Distraído...