Conoce tu sensibilidad para mejorar tu vida
¿Crees que tu emotividad está siempre a flor de piel? Mejor. Te enseñamos a expresar ese maravilloso don...sin padecerlo.
¿Te parece que a veces sufres por todo? ¿Te impresionan mucho las cosas? ¿Se te pone la piel de gallina, ante un hecho emotivo? ¿Alguna vez has tenido que salir del cine porque no podías aguantar ver una determinada escena, cruel o violenta? Si te ocurren cosas como estas, es probable que seas una persona altamente sensible. A veces lo consideramos un fallo porque nos lleva a sufrir en mayor medida que los demás. Pero no es la hipersensibilidad la que causa el sufrimiento, sino las experiencias que vive la persona que la posee, al ser difícilmente aceptada entre los demás. Suele ocurrir que los niños muy sensibles son tratados de peor forma que los que no lo son por sus compañeros del colegio, como podemos apreciar en estos tiempos de inadaptación y acoso escolar.
Ser muy sensible no es un defecto
En general, cuesta admitir a los que son diferentes, entre la mayoría. Por eso, las personas altamente sensibles crecen con la idea mal aprendida de que son raras, débiles o cursis. Es fácil confundir debilidad o sensiblería con sensibilidad, y esta confusión, puede llevar a vivir entre los demás, con un complejo de inferioridad, adquirido tras las experiencias negativas que del pasado. Sin embargo, la hípersensibilidad es una cualidad, que podemos aprender a manejar para nuestro bien y el de los que nos rodean, evitando sufrir al mismo tiempo.
Ser hipersensible te hace diferente de la mayoría, sí, pero no es un defecto, sino un regalo para vivir intensamente.
1. ¿Eres muy sensible?
Para responder a esta pregunta con seriedad, primero necesitas conocerte y saber lo que significa ser altamente sensible. Este test te orientará mucho.
La psicóloga clínica, Elaine Aaron, dice en su libro “El don de la sensibilidad” (Ed. Obelisco), que gracias a su hiper sensibilidad, pudo salvarse a sí misma y a su familia, de morir en un incendio en su casa mientras dormían. Esto no significa que todas las personas que son muy sensibles seamos capaces de detectar un fuego, pero de lo que no hay duda, es que al ser muy sensible, tus sentidos también están mucho más sensibilizados y esto implica, tener una mayor capacidad para vivir y experimentar la vida. También significa que sueles verte afectado por pensamientos y sensaciones negativas que pueden confundirse con las de tipo ansiedad o miedo. Estas sensaciones y tensiones producen una sobre activación de tu sistema nervioso, pero no deben ser confundidas con el temor o la angustia, puesto que no lo son, sino que son una respuesta al estrés. Sobre activarse ante la estimulación, es la forma de reaccionar de los seres muy sensibles.
Averigua tu nivel de sensibilidad
No todas las personas que son muy sensibles, tienen claro que lo son. Es fácil confundirse porque es posible que tu alta sensibilidad haya sido denominada con nombres que no corresponden a la realidad, como manías, histeria, excentricidades, etc. por ello, lo mejor es averiguar por ti mismo y gracias a un test profesional, en qué acontecimientos o aspectos de tu vida, eres altamente sensible y en cuáles no. Así sabrás cómo debes actuar en consecuencia, dependiendo de los resultados que obtengas.
Hay múltiples tipos de sensibilidad: activa, pasiva, creativa, emocional, intelectual, etc, pero todas ellas tienen un rasgo común y es que se desarrollan en un grado muy alto en las personas muy sensibles. Este test, elaborado por la psicóloga clínica Elaine Aaron, te ayudará a reconocerte y a redescubrir tu alta sensibilidad. Si contestas afirmativamente a la mayoría de estas preguntas, no hay duda que eres una persona altamente sensible.
1. Tengo la sensación de ser consciente de cosas muy sutiles en mi entorno.
2. Me afecta el comportamiento de los demás.
3. Soy muy sensible al dolor.
4. En los días muy ajetreados, suelo necesitar un rato de calma y soledad.
5. Soy muy sensible a los efectos de la cafeína.
6. Me abruman los sonidos o ruidos fuertes, los tejidos bastos, las luces muy brillantes, o los olores muy fuertes.
7. Tengo una vida interior rica y compleja.
8. Me conmueven profundamente las artes o la música.
9. Soy muy concienzudo.
10. Me asusto con facilidad.
11. Me agobio cuando tengo muchas cosas que hacer en muy poco tiempo.
12. Suelo saber qué hacer para que los demás se sientan cómodos en cualquier entorno.
13. Me molesta que los demás me increpen o exijan.
14. Me esfuerzo mucho por no cometer errores o no olvidarme de algo que considero importante.
15. Suelo evitar las películas violentas y los shows televisivos.
16. Me resulta desagradable la sobre activación que me provoca el ajetreo a mi alrededor.
17. Los cambios en la vida me conmocionan.
Gana seguridad en ti:
. Tu sensibilidad es como un baremo que mide cada una de tus acciones, pues juega un papel importante en tu vida. La sensibilidad es un don que, si bien a veces puede jugarte malas pasadas, te otorga múltiples cualidades y una forma singular de ser. Para empezar, tu actitud, tu comportamiento, siempre se fundamenta en tu sensibilidad.
. Las personas muy sensibles, sienten más profundamente la estimulación ante las nuevas experiencias, por eso, te puede parecer que cualquier pequeño cambio te abruma, pero no tiene por qué ser así. A todos nos cuesta aceptar los cambios, pero tener una mirada diferente puede transformar el proceso, en una oportunidad para el aprendizaje.
. Los muy sensibles, tenemos mayor capacidad de concentración y de memoria; rapidez de reflejos y de reflexión; y una gran precisión para clasificar los hechos. Si eres consciente de estas habilidades y de lo mucho que puedes hacer con ellas, los cambios no representarán ninguna molestia en tu vida sino todo lo contrario, serán una alegría constante.
2. Sé consciente de tus poderes
Las personas muy sensibles, viven y experimentan de una forma más profunda el mundo. Su don les otorga múltiples cualidades y talentos.
El mundo necesita seres sensibles, con una mayor conciencia de las cosas y de sí mismos. La sensibilidad te otorga una gran creatividad que puedes utilizar en cada cosa que hagas. Tus ideas son importantes y seguramente necesarias, lo que ocurre es que también tienes una mayor capacidad de sentirte profundamente afectado por los cambios en la conducta y en las emociones de los demás, por eso, es probable que a veces, pienses que tus ideas no son lo suficientemente buenas o incluso que no son importantes para otras personas.
Es mejor no jugar a adivinar lo que pensarán los otros, sino atreverte a proponer tus iniciativas y esperar la respuesta. No todas tus ideas serán buenas, pero seguramente que tienes algunas muy válidas para aportar al mundo y a tu entorno, por lo que sería bueno que les dieras una oportunidad.
No confundas sensibilidad con ansiedad o con miedo.
Alta calidad emocional
La empatía, la compasión, y la amabilidad con los demás, son otras de tus virtudes. Sabes cómo se sienten los demás y eres capaz de ponerte en su lugar para entenderlos mejor. Esta es una habilidad que las demás personas agradecen y valoran mucho, puesto que no todo el mundo es capaz de comprender, de saber escuchar e incluso de dar soluciones a sus problemas.
Del mismo modo, eres capaz de manejar tus emociones puesto que tu inteligencia emocional está muy desarrollada. Sabes cómo actuar en cada momento y qué decir para que otros se sientan bien. Esta es una herramienta magnífica para la convivencia, y es un ejemplo de educación y sociabilidad que también es muy necesario hoy día.
La verdad te hace libre
Eres un ser auténtico y verdadero, que ve las cosas con gran claridad mental, a pesar de las muchas sensaciones y emociones que captas a través de tus sentidos. Para ti la verdad tiene un valor que muchos no quieren darle, sin embargo, te has dado cuenta que la verdad no siempre se recibe del mismo modo, dependiendo de quien la escuche. Algunas personas parecen repeler todo lo que se refiera la verdad, por eso pensarás que en ocasiones es inútil decirla, aunque no es así. Es necesario decir la verdad para que se solucionen las cosas, para que cada uno aprenda su propia lección, y si te topas con personas que no están preparadas para escucharla, y para comunicarse con honestidad, no eres tú quien ha de renunciar a ser sincero, sino ellos quienes han de prepararse. Como escribió Max Ehrmann es su poema Desiderata: “Di tu verdad serena y claramente; y escucha a los demás, incluso al torpe y al aburrido; ellos también tienen su propia verdad...”
La fe te hace fuerte
Los artistas son siempre personas muy sensibles que utilizan medios como la escritura, la pintura o la música, para expresar la mirada especial que poseen, y su particular manera de concebir el mundo. No hace falta recordar las importantes aportaciones que el arte ha regalado a la sociedad en diferentes épocas. Muchas personas altamente sensibles, han dedicado sus vidas a los demás y trabajan sin ánimo de lucro, en organizaciones o asociaciones, que protegen otras sensibilidades, como la de los niños, los animales, y todos los desprotegidos. Muchos luchan cada día por defender los derechos de los que no pueden defenderse a sí mismos, gracias a su capacidad para la empatía y la compasión.
El amor a la verdad de las personas sensibles, les hace ser muy coherentes, pues necesitan actuar en consonancia con lo que sientesn y lo que piensan. POr eso, cuando defienden una causa honesta y noble, su vulnerabilidad se transforma en coraje y fortaleza.
La intuición te hace sabio
Habitualmente, sabes cómo van a reaccionar los demás, porque tu sensibilidad te provee de una intuición muy desarrollada, pero es posible que no le hagas demasiado caso de esas corazonadas, pero haz la prueba. Por ejemplo, dedícate a observar bien mientras alguien habla; luego intenta "adivinar" rasgos de su personalidad y por último pregúntale si coincide con la realidad.
Carl Jung decía de las personas altamente sensibles, que eran buenos educadores y promotores de la cultura, puesto que están dotadas de una gran vida interior, de la que nuestra civilización está muy necesitada. Opinaba que estamos naturalmente más influenciadas por el inconsciente, que nos da una información de máxima importancia, en cada momento. El sensible tiene un gran coraje cuando defiende sus creencias.
(Mar Cantero)