CÓMO DEJAR DE ESTAR ENFADADO CONTIGO MISMO
Por Maite Nicuesa
Existe un sentimiento que se convierte en punto de bloqueo emocional: estar enfadado contigo mismo de una forma puntual puede ser positivo al permitirte reflexionar sobre tus acciones y sobre las consecuencias de los hechos. Sin embargo, cuando el enfado se torna crónico produce un gran sufrimiento emocional. Cuando una persona vive enfadada consigo misma experimenta una lucha interior constante y se da la espalda a sí misma ya que la verdadera felicidad interior surge a partir de la amistad con uno mismo pero nunca se puede ser feliz a partir de la enemistad. ¿Cómo hacer las paces contigo mismo?
LIBERAR EL PESO DE LA CULPA
El perdón es un ejercicio de amor propio que ayuda a liberar el peso de la culpa por los errores del ayer. En este tipo de situaciones la persona puede preguntarse: ¿De qué me sirve estar enfadada conmigo mismo? ¿En qué me ayuda esta actitud?
La respuesta a estas preguntas permite tomar conciencia de la inutilidad de este sufrimiento que nos impulsa a mirar hacia atrás en lugar de hacerlo hacia adelante.
Es más constructivo responsabilizarte de tus acciones pasadas incluso de aquellas que consideras equivocadas que culparte por ellas. Al asumir con madurez la responsabilidad sobre las propias acciones también es posible influir de un modo más constructivo en el futuro inmediato.
POTENCIA LA AUTOACEPTACIÓN
Pon en práctica el valor de la auto-aceptación que muestra el amor incondicional hacia ti mismo asumiendo virtudes y defectos. No sentirte satisfecho por una acción realizada es un signo de inteligencia emocional puesto que es muy importante hacer autocrítica, sin embargo, castigarte por ello no te ayuda a crecer. El amor es más saludable ya que aprendemos más de nuestros propios errores cuando nos queremos a nosotros mismos y valoramos también nuestros aciertos.
Los conflictos y diferencias personales no sólo se pueden producir en el contexto de las relaciones personales de amor, amistad y familia. Las luchas más duras las asume cada ser humano consigo mismo como bien muestra el ejemplo del arrepentimiento y los remordimientos de conciencia.
APRENDE A PERDONARTE
La vida es muy larga y a lo largo del tiempo, una persona puede haber cometido errores de los que se arrepiente con el paso del tiempo. Existen personas que aseguran que no se arrepienten de nada porque eso forma parte de su vida. En realidad, el aprendizaje vital adecuado es el que implica hacer una autocrítica y una reflexión del camino realizado con el objetivo de asumir éxitos pero también, fracasos personales.
Reconocer nuestros errores implica asumir que no somos perfectos, que nos equivocamos y en más de una ocasión, tomamos el camino equivocado. Pero lo que no conviene hacer es estar eternamente castigándonos por acciones del ayer. Aquello ya ha pasado, por tanto, asúmelo como tal y perdónate de verdad. Solo cuando te perdones te sentirás libre.
SIGUE CAMINANDO
Sigue caminando hacia el mañana a la espera de vivir nuevas experiencias y disfrutar de momentos bonitos. Pero no te quedes estancado en un punto del pasado que puede haberse tornado una obsesión para ti. Si existe alguien de mucha confianza con quien te apetece hablar del tema que te afecta, entonces, anímate y da el paso. También puedes poner por escrito todos tus pensamientos.