Benditos sean los que piden perdón, los que dicen gracias y los que no se olvidan de decir por favor.
(Anónimo)
Dios me ha dado la risa para que aquellos que me oigan rían conmigo.
(Génesis 21,6)
Dios no creó las religiones; Él creó a los humanos.
(Anónimo)
El amor no se recibe cuando lo pides, sino cuando te lo entregan.
(Anónimo)
El agradecimiento puede alegrar un día, incluso cambiar una vida. Tu buena voluntad para decirlo es todo lo que se necesita.
(Margaret Cousins)
No existen los errores. Los acontecimientos que has provocado, incluso los desagradables son necesarios para aprender aquello que necesitas aprender. Todos los pasos que des son necesarios para llegar al lugar que has decidido ir.
(Anónimo)
Basta con cerrar los ojos para oír claramente.
(Tomas Tranströmer)
El verdadero amigo es aquel que está a tu lado cuando preferiría estar en otra parte.
(Anónimo)
Los errores que se cometen en la vida no son tan importantes como las lecciones que se aprenden de ellos.
(Anónimo)
A veces nuestro destino semeja un árbol frutal en invierno. ¿Quién pensaría que esas ramas reverdecerán y florecerán? Mas esperamos que así sea, y sabemos que así será.
(Goethe, Johann Wolfgang
Admitir que estabas equivocado es declarar que eres más sabio que antes.
(Anónimo)
Todo llega demasiado tarde para los que solo están esperando.
(Elbert Hubbard)
La mentira es la verdad preferida por los oídos ciegos.
(Anónimo)
A veces, las cosas más grandes son el resultado de las acciones más pequeñas.
(Anónimo)
Sabemos lo que somos, pero ignoramos lo que podríamos ser.
(William Shakespeare)
Si ayudo a una sola persona a tener esperanza, no habré vivido en vano.
(Martin Luther King)
No hay una almohada tan suave como una conciencia limpia.
(Proverbio francés)
Nuestra vida es obra de nuestros pensamientos: si tenemos pensamientos felices, seremos felices, si tenemos pensamientos desdichados, seremos desdichados, si tenemos pensamientos temerosos, tendremos miedo, si tenemos pensamientos enfermizos, caeremos enfermos, si pensamos en el fracaso, seguramente fracasaremos, y si nos dedicamos a compadecernos, todo el mundo huirá de nosotros.
(Marco Aurelio)
Hay derrotas que tienen más dignidad que la misma victoria.
(Jorge Luis Borges)
La lección que todos tenemos que aprender es el amor incondicional, incluye no sólo a otros sino a nosotros mismos.
(Anónimo)
