Caminamos en un mundo en el que todo está patas arriba, en el que todo parece estar dominado por seres sin escrúpulos que van dirigiéndonos a todos a una marcha atrás que nos costará caro, pero lo que no saben es que el ser humano tiene muchas salidas, muchas formas, y que siempre saben utilizar su inteligencia para no caer en las garras de los buitres, aunque para ello se tengan que soltar muchas lágrimas, muchos enfados y mucha impotencia, porque en todo camino hay senderos, en todo camino hay piedras grandes, pero en todo ser humano está la luz de cada uno para saber elegir, actuar y mejorar cada día tendiendo confianza, resurgiendo, y mostrando que la vida no es como ellos quieren que sea, que solo son hombres de negro que no piensan en los que les rodean sino en ellos mismos y así se van marchitando aunque no lo parezca.
Caminamos por senderos diversos en los que a veces está suave el terreno y otras lleno de piedras, pero de ellos vamos aprendiendo a ser y estar, pero sobre todo nos vamos conociendo a nosotros mismos, dándonos oportunidades para ser felices a nuestra manera, realizando todo lo que vamos teniendo en cuenta con los pies en la tierra , pero valorando todo el horizonte y sabiendo que en ese sendero nos vamos a encontrar siempre con personas que tenderán su mano si es necesario y otras pondrán sus pies para que tropecemos, pero lo importante es saber que todo se hace con esfuerzo, que todo es algo que tú construyes, y que no hay que dejarse vencer, sino que hay que manejar todos los hilos antes de arrepentirnos de hacer cosas por no saber cómo salir, por no aceptar por el orgullo o por no digerir que somos lo que somos y que hay que seguir caminando sembrando cosas para que siempre se vea esa luz tan necesaria aunque nuestro corazón sangre por dentro.
Caminamos y hacemos de la vida algo bello cuando damos sin pensar en recibir, cuando no vamos pregonando lo bueno o lo menos buenos que somos, cuando en nuestro ser es más lo noble que lo caduco, cuando miramos al frente sabiendo que todo está lleno de posibilidades para nosotros y que solo tienes que serenar el alma para poder llegar y transmitir, que se llega antes con pasos cortos que dando zancadas de gigante, porque todo lo que sube baja, y todo lo que está abajo puede subir lentamente, pero con pasos seguros, y, como dice el poeta, golpeando poco a poco para conseguir dar en los puntos y llegar más lejos de lo que creemos y somos, pues cada vez que lo intentamos, que nos esforzamos, que somos nosotros mismos, sin destruirnos, sin pensar que no podemos, lo vamos consiguiendo y se va abriendo esa luz, ese coraje y esa fuerza que existe en todos nosotros.
Caminamos con esperanza, con desolación, a veces pidiendo a gritos que nos amen, que nos valoren, que no seamos simples pasos por este mundo, pero el tiempo te va enseñando que todo eso lo primero que tienes que hacer es sentirlo tú dentro y así poder establecer esa comunicación con los que te rodean, poder mirar el horizonte que es inmenso y no solo tu círculo, sino que hay más mundo, más vida, más circunstancias, más de todo y que tú eres un simple peón que haces posible lo imposible a los que tienes mas cerca, pero que haces que sepan que están en un mundo y que es necesario aportar algo más de lo que se ve y se siente, pues todos tenemos ese don, esa manera, esa fortaleza y ese saber dar sentido para conseguir cambiar aquello que está fundamentado en la avaricia, el egoísmo, el egocentrismo y en lo superfluo, pues el ser humano es mucho más que todo eso y lo sabemos, aunque no lo reconozcamos siempre.
Caminamos por tantos caminos que a veces nos perdemos en el trayecto, pero siempre acabamos encontrando el nuestro y hacemos de él un rumbo, un sentido, una manera, una filosofía de vida, por lo cual siempre sabemos que el sol sale, que habrá tormentas, rayos, montañas altas y bajas, puentes que construir, puertas que se abren y se cierran, pero siempre tendremos la oportunidad de resurgir, de empezar y de hacer de todos los caminos algo necesario y bello para que al terminar el recorrido dejar algo que siempre esté y que nunca se pueda olvidar, que es la lucha por ser cada día mejor.
Y hoy caminamos juntos, hoy lo contamos y existimos, aunque lo dudemos, hoy lo hemos hecho posible porque es lo que hemos mostrado, y hoy es hoy y eso es lo más bello.
EstheR., sé feliz.
Esther Sánchez Orantos
