LA CULPA
Dice mi madre que la culpa es tan fea que nadie quiere cargar con ella y que el que siembra vientos, cosecha tempestades.
Uno de los errores más comunes del ser humano reside en no aceptar las realidades o consecuencias de nuestras acciones.
De forma natural tendemos siempre a protegernos de cualquier situación que nos pueda causar dolor, daño o vergüenza.
Por tal razón cuando éramos pequeños y nuestra madre o padre preguntaba -¿Tu rompiste esto? nuestra respuesta casi siempre era “que no”, a no ser que nos vieran o cogieran con las manos en la masa.
Vivir con culpa es malo cuando uno ha comenzado el proceso de auto-mejoramiento. Si te sientes culpable por algo, te recomiendo que des el paso de pedir disculpas y te liberes de tu cargo de conciencia.
(Héctor A. García)
Veamos algunas definiciones de lo que significa culpa:
CULPA: Falta, delito o pecado que se comete voluntariamente.
CULPABLE: Que tiene culpa. Aplicase a personas a personas, cosas y acciones.
DELITO: Culpa, crimen. Violación de la ley. Acción u omisión voluntaria que la ley castiga.
FALTA: Acto contrario al deber u obligación.
1.- PRECISIONES SOBRE LA CULPA
La culpa te fija en sucesos pasados, te sientes abatido molesto por algo que dijiste o hiciste y gastas tus momentos presentes afligido(a) por remordimientos de comportamientos pasados.
La culpabilidad funciona de la siguiente manera: Alguien emite un mensaje destinado a recordar que has sido una mala persona por algo que dijiste o no dijiste, sentiste o no sentiste, hiciste o no hiciste. Tú respondes sintiéndote mal e incómodo en tu momento presente. O sencillamente rompiste algunas de las reglas que te enseñaron y programaron desde niño(a) y que te dijeron que eran conductas erradas.
La culpabilidad es la emoción que despilfarra una mayor cantidad de energía emocional. ¿Por qué? Porque por definición, te sientes inmovilizado en el presente por algo que ya pasó, y no existe culpabilidad por grande que sea, que pueda cambiar la historia. El grado de inmovilización puede abarcar desde una pequeña incomodidad hasta una severa depresión y hasta el suicidio.
Si estás aprendiendo lecciones de tu pasado, y prometiéndote evitar la repetición de algún comportamiento especifico que te enseñaron que era incorrecto, eso no se llama culpa; simplemente estás aprendiendo de tus errores o que lo que a ti te enseñaron no va acorde con tus actuales creencias personales.
EL SISTEMA DE VALORES
Cada persona es un universo de creencias propias y dos hermanos gemelos que nacieron y se criaron juntos, no tienen que creer en lo mismo.
EL CODIGO MORAL PERSONAL
Cada uno de nosotros tiene consciente e inconscientemente un conjunto de pautas enseñadas que marcan nuestro comportamiento. Este es nuestro propio código moral que puede o no coincidir completamente con el código social en que vivimos, el cual por supuesto ha contribuido en gran medida determinar al nuestro. La sociedad crea reglas y nosotros las adoptamos la mayor parte de las veces como algo propio.
El contenido del código moral personal es el conjunto de normas que organizan nuestro comportamiento.
Esas normas pueden enunciarse, por ejemplo, como: "no frustrarás a los otros", "no dañarás a tus padres", " no te irás de la casa de tus padres antes de casarte". Una vez que el contenido de lo que te enseñaron se afianza en tu mente, se establece un proceso largo en el que empiezan a funcionar una serie de memorias programadas que garantizarán su cumplimiento.
Este sistema que se "llama el guardián del código" hace que cada vez que uno transgrede una norma o alguna de las pautas del código, se encienda una señal informando que el código se ha transgredido. Se trata de un programador interno que cumple las funciones de tortura interna.
EL REMORDIMIENTO
Una de las consecuencias más comunes del sentimiento de culpa es el remordimiento. ¿Qué es este sentimiento más precisamente?
Clínicamente se define como el pesar interno que produce en el alma el haber realzado una mala acción. Es la inquietud que despierta la memoria de una culpa, que va creciendo imperceptible dentro de uno. La vivencia del remordimiento es como tener un objeto intragable atravesado en la garganta, que finalmente se volverá contra uno mismo. El problema principal del remordimiento es que muchas veces se desconoce su origen. Se experimenta como una sensación que está continuamente presente pero no se sabe exactamente cuál es la culpa que está escondida detrás originando este malestar.
Remordimiento: Pesar, desasosiego, inquietud que queda después de haber efectuado una mala acción
Remorder: manifestar exteriormente el sentimiento interior reprimido.
2.-ORIGENES DE LA CULPABILIDAD.
El origen de la culpa proviene de la biblia y sus enseñanzas, sin esa programación, habría menos sentimiento de culpabilidad. La Biblia nos enseña que todos somos pecadores.
“Por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios.” (Romanos 3:23)
Si fuéramos a la definición netamente enciclopédica de la Culpa o Pecado, tendríamos que caminar los vericuetos de la religión, y en ellos encontrar que no es otra cosa más que la transgresión de una ley o práctica sagrada, sancionada por la divinidad.
Esta transgresión es considerada así ya según el judaísmo, el cristianismo, y el Islamismo. Podemos decir que en la mayoría de las religiones existe una determinada idea de lo bueno y lo malo, pero únicamente en la tradiciones judeo-cristiana e islámica se considera la referencia característica del pecado, convirtiéndose el mal comportamiento en un crimen directo contra el Ser Supremo.
En el hinduismo, el budismo, y el jainismo, el concepto más cercano al pecado o culpa es el de una continua acumulación a través de malos comportamientos, y con ello de malas consecuencias, que deben purgarse mediante un proceso de transmigración.
a.- La culpa residual.- Esta culpa es la reacción emocional que lleva consigo desde sus memorias infantiles. Estos productos de culpa son numerosos y si funcionan en el caso de los niños, la gente mayor sigue cargando con ellos en su edad adulta. Algunos de estos residuos implican amonestaciones como las siguientes:
"Mirar a una mujer con deseo es un pecado" (pero siendo hombre es algo natural)
"Mirar a un hombre con deseo es un pecado" (pero siendo mujer es algo natural)
"Desear a un hombre siendo hombre es un pecado" (pero por violar lo natural puede ser totalmente cierto)
"Desear a una mujer siendo mujer es un pecado" (pero por violar lo natural puede ser totalmente cierto)
"Tal cosa es un pecado"
"Dios te va a castigar"
"Vas a ir derechito para el infierno"
“Papá no te va a querer si haces eso otra vez"
“Deberías sentirte avergonzado(a) por lo que has hecho"
A la persona adulta las implicaciones subyacentes en este tipo de frases pueden seguir con vigencia cuando desagrada a su jefe o a otras personas que sirven como imágenes maternales o paternales.
Estas reacciones de culpa se producen porque en la infancia el niño aprende a ser manipulado por los adultos y estas mismas reacciones pueden seguir funcionando en el hombre que ha dejado de ser niño para convertirse en adulto.
b.- Culpa auto-impuesta.- Aquí el individuo se siente inmovilizado por cosas que ha hecho recientemente y es impuesta por sí mismo cuando se infringe una norma que el mismo ha creado y se ha auto-impuesto. Ejemplo: Estoy a dieta y no debo comer dulces, tomar refrescos y comer lechón. Entonces en una fiesta haces todo lo contrario. Ello te creara un sentimiento de culpa y desagrado contigo mismo.
Entre las culpas auto-impuestas está el haber usado drogas un día o haberte emborrachado y haber hecho el ridículo, y al día siguiente sentirte miserable por haberlo hecho.
Entre las culpas auto-impuestas están el haber reñido con alguien a quien quieres y luego detestarse por haberlo hecho.
Puedes seguir lamentándote hasta el fin de tus días, pensando en lo malo que has sido, y lo culpable que te sientes, y ni la más pequeña tajada de culpa podrá hacer algo para rectificar ese comportamiento.
Tu culpabilidad es una tentativa de cambiar la historia, de desear que las cosas no fueran como son. Pero la historia es así y no puedes hacer nada al respecto.
c.- Culpas relacionadas.-
La culpa relacionada con alguna enfermedad de los padres.
La enfermedad de uno de los padres es un súper-fabricante de culpas: "me has hecho subir la presión", alusiones a que "me estás matando" o "provocando un ataque al corazón" son muy eficientes a la vez que te culpabilizan de todas las dolencias típicas de la vejez. Y si eres vulnerable puedes llegar a sentirte culpable de la muerte de uno de tus padres.
La culpa relacionada al novio, la novia, (el) o (la) amante o cónyuge.
La culpabilidad por el "si tú me quisieras" es una de las maneras eficaces de manipular a un amante. Esta técnica es particularmente útil cuando uno quiere castigar a su pareja por algo que ha hecho. Es como si el amor dependiera de un tipo de comportamiento determinado. Cada vez que alguien no está a la altura de lo que se espera de él se puede usar la culpa para hacerlo volver al redil. Tiene que sentirse culpable de no amar al otro.
Hay varias culpas relacionadas más, tales como la culpabilidad en la escuela, en el sexo, en relación con los hijos, etc. etc.
(Desconozco el autor)