SER CAPAZ DE SER
Ser capaz de ser lo que uno quiere supone tener mucha paciencia, ir despacito pero seguro, es equivocarse una y otra vez pero no dejar de intentarlo, es aprender de todo lo que sucede y de tu pasado, y saber que la vida siempre da oportunidades y al igual que quita sabe ser generosa cuando eres agradecida y no te dejas vencer por ella. Pero si lo haces cada día dentro de ti, va creciendo y evolucionando tu ser y cada momento se hace diferente, se sonríe de otra manera y vives más feliz, a tu manera, porque mostrarás más seguridad, más confianza, y los miedos y temores van desapareciendo para convertirse en actuaciones y en una manera de ser coherente contigo y con los que te rodean.
Ser capaz de relacionarse con la vida sin presentar la impotencia de los que no saben ir mas allá, es saber que siempre van a existir adversidades, que nunca va a ser fácil, pero que siempre vas a poder caminar y que tienes lo suficiente para lograrlo en el momento que sabes discernir lo importante de lo que no lo es, porque todo va mostrándote, porque todo va a influirte y según como tú lo veas así va a ser el resultado; no por mucho gimotear o decir que todo es una desgracia, por mucho que hables de otros de lo que son o dejan de ser, vas a solucionar tus problemas y tendrás que sacarte tu sola de los problemas, porque si no lo haces tú no lo hará nadie, aun teniendo a personas estrellas a tu alrededor: ellos te acompañarán , estarán , y podrás dialogar y soltar la bestia con ellos, pero no podrán más que estar porque verdaderamente tendrás que ser tú la que des el paso, y la que te toque valorar lo que eres, como eres y lo que te está sucediendo, que seguro que es mucho pero tampoco tan enorme para que no veas la luz de tu interior y busques una salida, un camino, un sendero, un sin fin de cosas que te ayuden a abrir todo para dejar de ser víctima de tu propio ser y empieces a reaccionar.
Ser capaz de moverse por el mundo es algo que cuesta, porque siempre tendrás que crear alternativas, crear puentes, agradecer, perdonar, tolerar, respetar ,y no olvidar nunca que es tu rumbo , tu forma y tu manera la que estas construyendo cada día, y que gracias a ello los que te rodean pueden sentir que la vida es algo más de lo que se ve, de lo que está escrito, de lo que nunca sabrán aquellos que se creen que el mundo existe porque están ellos; te moverás con más libertad cuando aprendas a valorar todo lo que tienes y eres, cuando no tires más de la cuerda de lo que debes, y no te compares con todos , sino que tu vida sea algo que sirva para sembrar, para redimir el tiempo que te atrapa, para renovarte y poder así empezar de una manera nueva, porque tienes algo que lo hace posible, que por mucho que no lo quieras ver, que no te digan, o que no presientas, está siempre presente en lo más profundo, que es tu coraje, tu fuerza y tu luz, y así diferenciar lo que hace continuar y lo que hace que todo vaya marcha atrás y no evoluciones.
Ser capaz de vivir es darte la oportunidad de ser feliz a tu manera, es saber reconocer que la vida es algo más que un paso sin sentido, sin forma, sin pretensiones; es saber que lo material es importante, pero nunca tanto que te impida que el no tener deje de ser algo que te impida vivir, porque lo que sí vale es que estás aquí, es que siembras, escoges, aprendes, evoluciona, eres un ser con capacidades suficientes para no dejarte llevar por las corrientes que te impiden ver el horizonte, eres algo más que un cuerpo que va creciendo en su cronología y en su tamaño, pero no más, porque, aunque no lo parezca, lo que vas haciendo se va haciendo reflejo de lo que será bello o menos bello, pero eres tú la que lo consigue, la que hace que todas las dificultades sean como son, más fáciles o menos, pero es lo que te da lo más bello que tienes, que es tu manera de ser, tu increíble forma de no perder la visión y poder crear ese futuro que esta aquí ya y que necesita de ti para ser posible.
Y ser capaz de estar: hoy lo hemos hecho, hoy lo hemos intentado, hoy hemos querido, y hoy más que nunca no hemos dejado de reciclarnos para poder gritar que merece la pena.
Esther Sánchez Orantos
