A PARTIR DE MI PRÓXIMO AMANECER
Hoy me di un tiempo para pensar en la vida, en MI VIDA.
Decidí entonces que a partir del próximo amanecer voy a cambiar algunos detalles para ser cada nuevo día un poquito más feliz.
Para comenzar, no voy a mirar para atrás. Lo que pasó, es pasado. Si erré, ahora no voy a poder corregirlo.
Entonces ¿para qué remover lo que pasó? Sí, reflexionar sobre esos errores para hacer de ellos un aprendizaje para “mi hoy”…
No todas las personas que amo retribuyen mis cariños como a mí me gustaría… ¿Y qué pasa…? A partir del próximo amanecer voy a continuar amándolas, pero no voy a tratar de cambiarlas…
Eso no lo deseo. Cambio yo… Cambio mi modo de verlas, respeto su modo de ser. ¡¡¡Pero no pienses que voy a desistir de mis sueños !!!
A partir del próximo amanecer voy a luchar con más garra para que ellos se cumplan, pero va a ser diferente. No voy a volver a responsabilizar a nadie por mi felicidad.
¡VOY A SER FELIZ…!!!
Ya no voy a parar mi vida porque lo que deseo no sucede, porque un mensaje no llega, porque no oigo lo que me gustaría oír. Voy a crear mi momento…Voy a ser feliz ahora…
Tendré otros días por delante, nunca más daré mucha importancia a los problemas que aún no conseguí resolver.
A partir del próximo amanecer voy a agradecer a Dios por todos los días, por darme fuerza para vivir, a pesar de mis problemas.
Dejaré de sufrir por lo que no consigo tener, por lo que no oigo o no veo, o por el tiempo que no tengo. Tampoco sufriré más por anticipado, pensando siempre lo peor…
A partir del próximo amanecer, sólo voy a pensar en las cosas buenas que tengo. Mis amigos y mi familia nunca más necesitarán darme un hombro para llorar. Voy a aprovechar su presencia para sonreír, cantar, para repartir felicidad.
A partir del próximo amanecer voy a ser yo mismo, nunca más voy a tratar de ser un modelo de perfección.
Nunca más voy a sonreír sin ganas o decir palabras amorosas sólo porque creo que los demás quieren oírlas.
A partir del próximo amanecer voy a vivir mi vida
SIN MIEDO A SER FELIZ
y aprenderé a quererme cada día un poquito más.
(M. Luisa Cendrós)