Es curioso cómo la vida gira y gira y nunca se para, aunque tú estés como estés; es curioso cómo te hace avanzar cuando tienes una disposición y cómo te hace parar y estancarte cuando dentro de ti hay una gran oscuridad. Pero también es cierto que siempre, por muy oscuro que esté el tiempo, te va dando esa respuesta que esperas, aunque no te guste; es cierto que cuando te propones salir sales, y no importa el tiempo que tardes en ello, porque siempre hay una salida y esta te ayuda a reforzarte y a saber quién eres, lo que quieres, y cómo lo quieres.
Es casi un recorrido que tú tienes que hacer en tu día a día, sin mirar atrás, porque de ello ya has aprendido, en el que te puedes encontrar muy sola, pero si lo analizas nunca lo estás, porque siempre hay personas que saben expresar su forma y hacer posible que te sientas valorada y que vuelvas a encontrar ese rumbo que empezaste y que ahora has podido perder en ese vaivén de la vida misma, porque siempre hay una posibilidad de encontrar cuando no te cierras, cuando abres el horizonte a la vida para poderla vivir, cuando dejas de preocuparte por esas cosas que tanto te agreden, pero empiezas a dar sentido y a valorar lo que te rodea con el corazón, analizando siempre, pero yendo mas allá de la superficie, porque siempre sabrás que tú vales más que todo eso, y que llevas lo más preciado dentro de ti, y que si no lo haces tú no lo hará nadie por ti.
Es ese el sentimiento que tienes y quieres expresar, pero no sabes como acercarte a él, pero siempre puedes encontrar el camino de encontrarlo y no dejarte llevar por la corriente de los que, ante su impotencia, recurren a métodos no aptos para los seres humanos, pues si algo tenemos de grande es que podemos pensar, analizar, formarnos, evolucionar, buscar soluciones, aportaciones, sentimientos que se encuentran y se desencuentran, pero de todo se va regenerando el alma y va haciendo que nos levantemos una y otra vez, que nos equivoquemos tantas veces como sea necesario, pero que siempre confiemos en que la vida es un gran intento de seguir, de empezar y de resistir, porque es algo que se siembra, que se templa, que se hace y deshace, que se construye paso a paso, que se digiere a veces con dolor de estómago, a veces con sangre de corazón, pero siempre dando la grandeza de superación, de discernir, de mostrar toda la belleza que se lleva dentro.
Es ese sendero que has de andar sin saber el final, que quizás sea lo que menos importa, porque mientras buscas el final te vas perdiendo lo que te va apartando en sí él, y es una pena porque en ese sendero te vas encontrando con cosas que siempre merecerán la pena, te vas encontrando con cosas a desechar, a quitar, pero también verás flores, verás cómo nacen, resurgen, y se llevan pisotones, pero ellas son fuertes y vuelven a regenerarse porque la vida es un continuo modo de regenerarse y de transformarse en seres mejores.
Es algo que se lleva dentro, es algo que vas trabajando desde que tienes uso de razón, y te vas preparando al principio con ayuda hasta que te das cuenta de lo que eres; es algo que va aumentando porque vas observando, vas dando pasos hacia adelante y atrás, pero siempre queriendo avanzar y renacer como el sol lo hace día a día, porque de ti depende poderlo hacer, poder ser y crecer, y no importa que llegues a pensar que no puedes, porque siempre podrás, tardes lo que tardes; siempre hay un antes y un después, siempre hay una manera, siempre un motivo, siempre una excusa para los que no quieren madurar, pero siempre un puente para poder atravesar todos los baches y todas las adversidades, que nunca es fácil, que nunca será de color rosa, pero tampoco tan negro que no veas la luz de tu corazón y de los que realmente te quieren y te rodean.
Es y eres tú cuando te lo propones, es y eres tú cuando confías, cuando expresas, cuando das lo mejor, cuando existe en ti el respeto, la tolerancia, y el amor hacia ti y a las cosas y personas que te rodean, es hoy, es mañana, ha sido ayer, y será lo que tú quieres que sea.
EstheR., sé feliz.
Esther Sánchez Orantos
