APRENDIZ DE SABIO
Toma nota, levanta acta de todo lo bueno y positivo que te vaya sucediendo y guárdalo en la ”despensa” de la mente para cuando lleguen los malos tiempos.
Define lo que es verdaderamente importante para ti y no permitas que lo banal te preocupe.
No caigas en el grave error de tratarte mal a ti mismo, ni pierdas el control porque las cosas no sucedan a tu gusto o los demás no las consideren como merecen.
Atrévete a hacer siempre, y en primer lugar, aquello que temes pero es bueno para ti. Ahorrarás energía, estrés, desgaste y sentimientos de culpa.
Aprende cada día a ser tú mismo y evita la rutina y el aburrimiento.
No te compares con los demás ni compitas con nadie.
Haz limpieza total de las cosas inútiles, de pensamientos y sentimientos negativos, de odios y rencores.
No permitas que nadie organice tu vida y te conduzca a situaciones que tú no has elegido.
Lleva la naturaleza a tu vida y déjate inundar de su fuerza y de su belleza.
Ejercita tu cuerpo de forma constante y aliméntate de forma racional.
Date un homenaje de vez en cuando, quiérete y no consientas que nadie te haga daño.